Nuevo Laredo, Tam.- Entre flores de cempasúchil, música y sonrisas, más de 2 mil 500 neolaredenses se reunieron en el Palacio Federal para vivir una de las tradiciones más queridas de México: el Festival de la Catrina 2025, organizado por el Gobierno Municipal de Nuevo Laredo.
El evento reunió el talento y la creatividad de la comunidad a través de los concursos de catrinas, altares de muertos y al mejor tamal, llenando de color y tradición el corazón de la ciudad.
“En Nuevo Laredo celebramos la vida recordando con amor a quienes ya no están. Estas tradiciones nos unen, nos llenan de orgullo y nos recuerdan que la cultura mexicana vive en cada familia”, expresó la secretaria de Desarrollo Económico, Lorena Cavazos.

Los asistentes disfrutaron de un ambiente festivo en el que la imaginación y el arte fueron los protagonistas. Los altares mostraron historias, recuerdos y símbolos de fe, mientras las catrinas desfilaron con elegancia.
La noche se iluminó con el espectáculo Réquiem Fest, un show que mezcla la música y el teatro para rendir homenaje a una de las tradiciones más importantes de México.

Como muestra de generosidad y espíritu comunitario, el Sistema DIF Nuevo Laredo compartió con todos los presentes más de 2 mil tamales y vasos de champurrado gratuitos, llenando el evento de aroma, sabor y calidez mexicana.
El festival también sirvió para reconocer la dedicación de quienes mantienen vivas nuestras costumbres, premiando a los ganadores de cada concurso con reconocimientos y regalos.

En una competencia cerrada, la ganadora de a la mejor Catrina categoría infantil, lo ganó la pequeña Vania de León Aguilar, mientras en la categoría adulto, el ganador fue Fernando Hernández Maldonado, ambos obtuvieron la calificación más alta en cuanto a maquillaje, vestuario, creatividad y actitud.
La preparatoria municipal “Gómez Morín”, se alzó como la ganadora del concurso de Altares de Muerto, mientras que el premio al mejor tamal, lo ganó “Tamales Guadalupe” quienes con su sabor deleitaron a los asistentes y jueces.
Con esta celebración, Nuevo Laredo revive con orgullo por las tradiciones mexicanas y su compromiso con la cultura, el arte y la unión familiar que dan identidad a esta frontera.


