NUEVO LAREDO, TAM.-De enero a la fecha, las consultas de menores con deshidratación, vómito y diarrea en el Hospital Materno Infantil de Nuevo Laredo han disminuido en un 60 por ciento.
Jorge Pérez Santos, director general del Hospital señaló que pese al fuerte calor que se registró en junio, julio y agosto las consultas de niños fueron pocas.
“El factor que incidió en ello fue la pandemia por Covid-19, yo creo que la gente por el mismo temor de contagiarse sigue manteniendo a sus pequeñitos resguardados”, comentó.
Aseguró que el ingreso de pacientes hospitalizados con diarrea, vómito o deshidratación fueron casi nulos.
“Si había consultas, pero no fuera de serie, definitivamente las consultas no se incrementaron, solamente se mantuvieron, en el área de pediatría de encamados siempre teníamos mínimo de uno a tres pacientes, había ocasiones que nos faltaban camas para atender a los niños hospitalizados y este año pasan las semanas y las salas de internamiento de pediatría han estado solas”, recalcó.
Pérez Santos agregó que esta baja se debe a que los padres de familia continúan resguardando a sus hijos en sus hogares.
“Esto se debe a que la gente tiene un poco más de higiene, lo cual se ve reflejado en la disminución de internamientos de menores en el Hospital Materno Infantil”, concluyó.