Nuevo Laredo, Tam.– En conferencia de prensa encabezada por Miguel Ángel Vázquez Maldonado, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (CANACINTRA) en Nuevo Laredo, quien estuvo acompañado por Gabriela Osorio Hernández, vicepresidenta, y René Alejandro Vallejo Martínez, secretario, se abordó el tema de la reducción de la jornada laboral, sin medidas de apoyo, para las empresas y comerciantes establecidos.
En lo que acordaron los tres representantes de CANACINTRA, es que esta reforma, como consecuencia inmediata, podría aumentar la informalidad, que ya afecta en la actualidad al 55% de la población en México.
“La confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (CONCANACO SERVYTUR), impulsa la transición hacia un modelo laboral más humano y sostenible, como plantea el Gobierno de México dentro del Plan México. Este proceso debe considerar la realidad operativa de las micro, pequeñas y medianas empresas familiares del país, asegurando que su funcionamiento y competitividad no se vean comprometidos”, comentó Miguel Ángel Vázquez Maldonado, Presidente de CANACINTRA Nuevo Laredo.
De acuerdo al presidente de dicha Cámara, el comercio, los servicios y el turismo representados por CONCANACO SERVYTUR, generan 65 de cada 100 empleos formales, mientras que la industria manufacturera impulsada por CANACINTRA, tiene el 29% de su sector, que se traduce en un 5% del empleo formal en el país. Por lo que juntos representan el 70% del empleo formal en México, por lo que se consideran unidos el motor de la economía nacional, sosteniendo el desarrollo de millones de familias a través de empleadores de todos los tamaños.
“La reducción de la jornada laboral puede representar un avance. Pero, si se aplica de manera uniforme y sin considerar la diversidad de los sectores primario, secundario y terciario, el tamaño de los negocios y empresas podría comprometer la estabilidad de los negocios y el sustento de quienes dependen de ellos”, puntualizó Vázquez Maldonado.
Para concluir, los representantes de CANACINTRA dejaron ver que para los empresarios o patrones en general, no hay un subsidio por parte del gobierno federal que les dé estabilidad, ya que si bien la reforma con la nueva jornada laboral beneficiaría a los empleados, a las empresas y patrones les afectaría considerablemente.