NUEVO LAREDO, TAM.- Procedente de Canadá y, después de cruzar por Estados Unidos, este sábado llegó a Nuevo Laredo la Rosa de Plata.
En una ceremonia llevada a cabo a mitad del Puente Internacional número uno, el Obispo de Laredo, Texas, James Tamayo acompañado de Caballeros de Colón, entregaron la Rosa de Plata, signo de paz, a su contraparte mexicana: al Obispo de la Diócesis de Nuevo Laredo, Enrique Sánchez Martínez y a los Caballeros de Colón.
Matlachines, banda de guerra y público en general, fueron testigos de esta entrega de la Rosa de Plata que tiene como destino final la Catedral Guadalupana en Monterrey.
“Este es un signo que representa nuestra unidad en la fe. La fraternidad de los dos Laredos se ve representada en este acto, igual que la presencia de los Caballeros de Colón que siempre están dispuestos a participar en ministerios de nuestra iglesia”, dijo James Tamayo, obispo de Laredo, Texas.
Sánchez Martínez, obispo de la Diócesis de Nuevo Laredo, dijo que este encuentro fraternal se realiza cada año, en honor a la Virgen de Guadalupe.
Sirve para profesar la fe en el Dios Único. Cada año es la recepción de la Rosa de Plata, signo de amor y fe, pero también debe considerarse de paz. Y que con su presencia fortalece a todos, expresó por su parte Monseñor Sánchez Martínez.
La Rosa de Plata pernoctará en Nuevo Laredo, y mañana saldrá en relevos hacia la Ciudad de Sabinas y, de ahí a Monterrey, donde estará arribando al filo de la medianoche del domingo.
