NUEVO LAREDO, TAM.- La Carretera Monterrey-Nuevo Laredo se mantiene fuera de los tramos inseguros para el autotransporte de carga, mientras Nuevo León se agregó a la lista donde se cometen robos de mercancías y camiones pesados.
Desde 2016, el delito federal de robo de mercancías ha aumentado cada año en un 70 por ciento, de acuerdo a estimaciones de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (CANACAR) y la Carretera Monterrey-Nuevo Laredo no aparece en la lista de los tramos con mayores pérdidas para empresas transportistas.
Eduardo Lozano Guajardo, delegado en Nuevo Laredo de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (CANACAR), explicó que el problema que más perjudica al sector del autotransporte de carga es el robo de mercancías y de tráileres en ciertas carreteras del país, porque es una problemática que debilita la capacidad financiera de cientos de empresas transportistas y propició un incremento del 200 por ciento el costo de las pólizas.
Los tramos carreteros donde se cometen más robos a empresas transportistas se concentran principalmente en Puebla y Guanajuato, además en Veracruz, Estado de México y Michoacán, y durante 2019 se reportaron delitos en Nuevo León y Jalisco.
Los productos con mayor demanda por la delincuencia son aquellos de fácil reventa en los mercados negros como alimentos y bebidas, medicamentos, combustible, misceláneos, ropa y zapatos, materiales de construcción e industrial.
La CANACAR mantiene su exigencia al gobierno federal de aplicar medidas eficaces contra dicho delito federal porque afecta a todas las regiones del país, y consideran que sin una estrategia para frenar la inseguridad pública no sólo dañará al sector del autotransporte de carga sino toda la economía del país.
En 2018, la CANACAR y las autoridades federales contabilizaron 17 mil 270 incidentes de robo a transporte de carga, lo que representó un incremento de 17% comparado con 2017 y un 76% de incremento con 2016.
Ayer Líder Informativo publicó que la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) reportó que en 2019 se robaron 10 mil 750 vehículos pesados asegurados en México, lo que significó 81% más que en 2014, además entre las marcas más robadas son tractocamión Kenworth, tractocamión de Freightliner; caja seca de Semirremolques; tractocamión de International y Dolly de Semirremolques.
La AMIS considera que el robo de tráileres afecta directamente a la economía formal, con altos impactos en el traslado de mercancías y a toda la cadena productiva, una situación que las empresas no aseguradas tienen que reconocer como pérdidas económicas, lo que influye directamente a los costos de producción.
