NUEVO LAREDO, TAM.- Si la PROFECO comprueba que los dueños de gasolineras venden litros incompletos, entre las sanciones que puede aplicar es inmovilizar las bombas, y en los casos cuando los dueños impiden las revisiones son acreedores a multas hasta por 800 mil pesos.
Cada mes en promedio, personal de la Procuraduría Federal del Consumidor PROFECO inspecciona las 57 gasolineras de Nuevo Laredo para comprobar que venden “litros de a litro” y descartar alteraciones en las bombas y en la calidad del combustible.
Desde abril hasta la fecha, el sector gasolinero local reporta disminución en sus ventas en un 50 por ciento de sus ventas al reducirse la cantidad de vehículos en circulación debido a la pandemia de Covid-19, y solamente registraron un ligero aumento a principios de junio cuando se reactivó una parte de la actividad comercial.
José Luis Palos Morales, presidente de la Asociación de Gasolineras, consideró que en éstos momentos de pocas ventas y bajos ingresos en las estaciones de servicio, sería bastante negativo que se cierre una gasolinera por incumplir estándares.