CD. DE MÉXICO.- Diputados de Morena asestaron ayer un golpe a la ciencia, al cine nacional, a la atención de desastres naturales, al financiamiento al campo y al deporte de alto rendimiento, entre otros sectores, al aprobar la extinción de 109 fideicomisos, a fin de lograr una bolsa de 68 mil 478 millones de pesos.
De última hora, se dispuso también que la Secretaría de Hacienda disponga de recursos del Fondo de Salud para el Bienestar, que era el Fondo de Enfermedades Catastróficas del desaparecido Seguro Popular, para la atención de la epidemia de Covid-19, que se calcula podrían ser 30 mil millones de pesos más. Anoche avanzó el dictamen de reformas a diversas leyes para desaparecer los fideicomisos y fondos, con los votos a favor de la mayoría de Morena.
El coordinador de Morena, Mario Delgado, reconoció que los diputados solo aprobarán la reforma, pero no saben cuánto dinero quedará para atender necesidades del Gobierno y cuánto para cumplir con las obligaciones de atención a los sectores afectados, a los cuales se les prometió que seguirían los apoyos. “Hacienda la tiene. Le corresponde a Hacienda (decir la cifra)” dijo al admitir que no tienen idea de cuánto dinero y cómo se va a gastar el dinero.
Los sectores más afectados son los de la ciencia, investigación y docencia, debido a que desaparecerán 65 fondos del Conacyt, por un monto de 25 mil 741 millones de pesos, y otros 26 fondos de los centros de diversos investigación del país, con una afectación de 785 millones de pesos.
La reforma también impacta al Fidecine, que tiene 224.2 millones de pesos; al Fondo para el Deporte de Alto Rendimiento, que concentra 213.4 millones de pesos; y al Fondo para Desastres Nacionales, del que se dispondrán 6 mil 861 millones de pesos.
El Sindicato del Personal Académico del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) alertó que el Fideicomiso de Ciencia y Tecnología de esa institución permite cumplir con los objetivos de investigación y docencia, además de que los fondos no solo son de origen público sino también privado.
En el mismo sentido se pronunciaron académicos de la UNAM y colectivos en defensa de Derechos Humanos.
