NUEVO LAREDO, TAM.- A pesar del estado de alerta que se vive en Estados Unidos y México por el Coronavirus 2019, autoridades migratorias insisten en deportar a familias completas a deshora, lo cual pone en riesgo su integridad sanitaria.
“Siguen llegando deportados en horarios muy diferentes, en la noche incluso. Vienen desprotegidos y ya hemos hecho un llamado al Gobierno Federal para que atiendan a las personas que vienen deportados, no es suficiente que les chequen si tienen fiebre, incluso han llegado a la 1 o 2 de la madrugada, hay un protocolo que seguimos para evitar que haya contagios”, explicó el obispo Enrique Sánchez Martínez.
Monseñor aclaró que a pesar de que en algunas otros albergues para migrantes, ya han dejado de brindar sus servicios, esto no sucederá en Nuevo Laredo.
“Nosotros somos más de 110 casas del migrante en el país entre católicas y de civiles, pertenecemos a una asociación. De casas de migrantes y no han cerrado. Posiblemente más adelante y suceda por contagio, por lo no pronto no se ha hecho”, detalló.
Enrique Sánchez lamentó que todas las promesas que el gobierno federal hizo para los migrantes, nada se haya cumplido. “Les había prometido hasta trabajo”, concluyó.