Nuevo Laredo, Tam.— Cuatro funcionarios de primer nivel del Gobierno Municipal han abandonado la ciudad tras ser identificados como parte de una compleja red de corrupción ligada al Clan Carmona y al Cártel del Golfo, quienes financian la campaña de reelección de la alcaldesa con licencia, Carmen Lilia Canturosas Villarreal.
Para refugiarse en su ciudad natal, Reynosa, se marchó Gonzalo Hernández Carrizales, quien ocupaba el cargo de jefe de la Oficina de la presidenta y manejaba un presupuesto anual de 330 millones de pesos, superior al asignado a programas sociales o becas municipales.
Asimismo, Adrián Alexandro López Villanueva, director de Atención Ciudadana, quien tenía bajo su control la oficina del REPUVE Municipal, donde, según el decreto presidencial, se han nacionalizado más de 50 mil vehículos y contaba con un presupuesto discrecional.
También huyó de Nuevo Laredo el reynosense José Armando Garza Faz, director de Adquisiciones, quien habría sido colocado en el cargo por el Clan Carmona como forma de pago a Carmen Lilia por su financiamiento en la campaña de 2021. Se le acusa de cobrar hasta un 30% de comisión a las empresas locales y de dar de alta a compañías de Reynosa, Tamaulipas, a quienes favorecía.
Martín Morga Martínez, jefe de Ingresos Municipales, es el cuarto funcionario que abandonó la ciudad repentinamente tras ser descubiertos sus vínculos con el Cártel del Golfo y el Clan Carmona, que controlan el comercio ilegal de combustible y supuestamente están financiando la campaña de reelección de Carmen Lilia Canturosas Villarreal.
En su lugar, se designó a Mariano de la Cruz Gamboa como jefe de la Oficina del Presidente, a Eduardo Pérez Sansores como director de Adquisiciones, a Pablo Garza Elizalde como director de Bienestar Social, a Miguel Carrillo Barrios como director de Atención Ciudadana y a Carlos Antonio Garza Cisneros como director de Ingresos.
