WASHINGTON.— Los empleadores de Estados Unidos incrementaron las contrataciones en mayo, agregando 339.000 empleos, muy por arriba de las expectativas y evidencia de la solidez duradera en una economía que la Reserva Federal trata desesperadamente de enfriar.
El informe del gobierno publicado el viernes reflejó la resistencia del mercado laboral luego de más de un año de aumentos rápidos de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal. Muchas ramas de la economía, desde la construcción hasta los restaurantes y la atención médica, siguen agregando empleos a fin de mantenerse al día con la demanda de los consumidores y restaurar su fuerza laboral a los niveles previos a la pandemia.
Sin embargo, hubo algunos mensajes contradictorios en las cifras laborales, que también mostraron que la tasa de desempleo aumentó a 3,7%, desde el mínimo de cinco décadas del 3,4% en abril. El gobierno compila los datos de desempleo con una encuesta diferente a la usada para calcular las alzas de empleo. Las dos encuestas a veces pueden diferir.
La duración de la semana laboral promedio también disminuyó y el crecimiento salarial se enfrió, generando un informe laboral que, de acuerdo con los economistas, ilustraba una situación inusualmente complicada del mercado. Aun así, el panorama general era alentador.
‘El crecimiento del empleo sigue siendo sólido en lo que sin duda es un mercado laboral históricamente ajustado’, explicó Joe Brusuelas, economista jefe de la consultora RSM. ‘Mientras la economía siga produciendo más de 200.000 puestos de trabajo al mes, esta economía simplemente no va a caer en recesión’.
En el informe del viernes, el gobierno actualizó drásticamente al alza su estimación del crecimiento del empleo en marzo y abril en 93.000 empleos adicionales, lo que subraya la durabilidad del mercado laboral.
El salario promedio por hora en Estados Unidos aumentó 11 centavos a 33,44 dólares, 4,3% más que hace un año.