NUEVO LAREDO TAM.- Como si nunca hubiese partido de su natal Nuevo Laredo, este sábado al mediodía familiares, amigos y seres queridos acompañaron a Monseñor Andrés Luis García Jasso a la Misa de Acción de Gracias por su nombramiento como Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de México.
La celebración religiosa se realizó en la Catedral del Espíritu Santo, la cual se encontraba repleta de flores en señal de alegría por la presencia de monseñor Andrés.
La sencillez y humildad, son dos características que sus ex compañeros de universidad destacaron del recientemente nombrado obispo.
Fue al 20 para las 12:00 cuando acompañado de su hermana, Andrés Luis García Jasso llegó a la Catedral, aquí en un breve encuentro con medios de comunicación reiteró el cariño y la cercanía que lo mantiene en contacto con su tierra natal.
“Soy originario de aquí, don Enrique, el obispo de esta Diócesis me invitó a celebrar una misa por acción de gracias por mi nombramiento como obispo auxiliar y vengo a mi tierra, mi casa. Yo cada que tengo oportunidad vengo a Nuevo Laredo, aquí tengo mi casa, mi madre, mis amigos. Aunque tengo muchos años en la Ciudad de México para mí siempre es de gran alegría regresar a casa, regresar a mi tierra”, afirmó.
“Me llena de gozo, de alegría estar aquí, ver a mi familia, mis padrinos de bautismo, a mis amigos de la preparatoria y la universidad, a tanta gente que ha estado conmigo acompañándome en mi preparación, en los momentos alegres, los tristes, difíciles que han sido parte importante en mi peregrinar”, expresó.
Familiares, amigos y seres queridos acompañaron a Monseñor Andrés Luis García Jasso a la Misa de Acción de Gracias. [Reynaldo García / Líder Informativo]
Fue el pasado 3 de julio, cuando la Nunciatura Apostólica comunicó a través de la Secretaría General de la Conferencia del Episcopado Mexicano, que su Santidad Francisco había nombrado Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de México al Pbro. Andrés Luis García Jasso.
“Esto no es una cuestión de esfuerzo, sino es una cuestión de gracia y doy gracias a Dios por esta oportunidad”, mencionó.
A los jóvenes seminaristas de esta ciudad que se encuentran en formación, recomendó seguir el ejemplo de Jesús más que el de él.
“El ejemplo es Jesucristo, lo que a mí me ha dado la alegría, ha reforzado siempre mi vocación, mi servicio a la iglesia y es lo que yo les puedo invitar, a seguir a Jesucristo”, manifestó.
A quienes por alguna razón no pudieron estar presentes en esta misa, monseñor envió un mensaje en el que aseguró estar en permanente oración por esta frontera.
“Mi mensaje es de amor y de paz, que los llevo siempre en el corazón y mis oraciones y siempre estaremos rezando por nuestra ciudad. Que la paz esté siempre aquí y juntos estamos caminando en este peregrinar en la vida”, declaró.
Finalmente agradeció a todas las personas que lo acompañaron en la celebración religiosa y solicitó permanente oración para desempeñar debidamente su ministerio episcopal.
“Me encomiendo a sus oraciones, la iglesia necesita pastores, pero los pastores necesitan de la oración para poder servir, ayudar, guiar e interceder ante nuestro padre, les pido seguir orando por mí”, concluyó.
