NOM PEN, Camboya.- El primer ministro de Camboya lideró el jueves un acto para celebrar el regreso de docenas de valiosas antigüedades procedentes de museos y coleccionistas privados en el extranjero, y dijo que su gobierno seguiría trabajando para recuperar más.
Hun Manet, que asumió el cargo el año pasado tras el largo mandato de su padre, Hun Sen, dijo que las 70 esculturas devueltas reunían de forma simbólica al pueblo camboyano con las almas de sus ancestros. Los artefactos se expusieron en el Palacio de la Paz, la sede del gobierno del país.
Muchas, si no todas las piezas fueron saqueadas durante un largo periodo de guerra civil e inestabilidad cuando Camboya estuvo gobernada por el brutal régimen comunista del Jemer Rojo en la década de 1970.
Camboya se ha beneficiado de una tendencia en las últimas décadas en la que se han repatriado tesoros artísticos y arqueológicos sacados de sus países de origen. Eso incluye obras de arte asiáticas antiguas y piezas perdidas o robadas en momentos de inestabilidad en lugares como Siria, Irak o Europa durante la ocupación nazi.
“Un total de 70 objetos culturales jemeres han regresado a través de una serie de distintos procesos, incluidas devoluciones voluntarias, negociaciones, incautaciones y procesos legales, de diferentes colecciones como la familia Lindemann, Jim Clark, el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York y otros coleccionistas privados en Estados Unidos”, indicó el Ministerio de Cultura y Bellas Artes en un comunicado.
Las piezas devueltas incluyen importantes obras de arte hindúes y budistas del periodo Angkor, entre el siglo IX y XIV y más antiguas, “especialmente estatuas de piedra de valor incalculable como la del guerrero mítico de la épica hindú Mahabharata, estatuas de Shiva y Parvati y la estatua de Ardhanarishvara de la antigua capital de Koh Ker”, indicó el comunicado.
Hun Manet dijo que entre 1996 y el mes pasado se han devuelto a Camboya 1.098 piezas, 571 de coleccionistas privados y 527 de instituciones y gobiernos extranjeros.
Las 70 piezas expuestas el jueves incluían 14 llegadas del Museo Metropolitano de Nueva York a principios de julio. El resto, de coleccionistas privados, llegaron a finales de julio.
Las piezas del museo neoyorquino fueron compradas y traficadas por el conocido marchante de arte Douglas Latchford, acusado en 2019 de orquestar una supuesta trama para vender durante años antigüedades camboyanas en el mercado internacional de arte. Latchford, que murió al año siguiente, negó haber participado en contrabando.
Un comunicado de la embajada estadounidense en Camboya indicó que el gobierno estadounidense “ha facilitado el regreso de unas 150 antigüedades”, incluidas devoluciones previas de una estatua del dios elefante hindú Ganesh y la obra del siglo X “Skanda sobre un pavo real”, ambas expuestas en el Museo Nacional de Camboya en Nom Pen.
“Estados Unidos es un socio comprometido y fiable para proteger la herencia cultural de Camboya”, dijo la encargada de asuntos de la embajada, Bridgette Walker, que asistió a la ceremonia, según declaraciones citadas por la agencia camboyana. “Devolver piezas saqueadas a su legítimo hogar es lo correcto”.
En general, las relaciones entre Camboya y Estados Unidos son tensas, debido principalmente a las críticas de Washington por la supuesta represión política y violaciones de derechos humanos por parte del gobierno camboyano.