NUEVO LAREDO, TAM.– La tarde-noche de este jueves, de nuevo se hicieron presentes las lluvias en diferentes sectores de Nuevo Laredo. Lo que sin duda vino a refrescar la región, tras una intensa sequía que mantiene preocupados a los ganaderos y productores así como a las autoridades.
Para este viernes se espera inicie un ligero descenso en la temperatura ambiental, al pronosticarse 37 grados centígrados como máximas, mismo pronóstico para este sábado y 34 grados como máximas el domingo.
Un marcado contraste con los días de extremo calor registrados en esta región, en donde se han dejado sentir hasta 42 grados en las máximas, durante varias semanas.
Incluso el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), pronostica sigan las posibilidades de lluvia durante viernes, sábado y domingo, mismas que traerían mucho beneficio para la región.
A partir del próximo lunes y hasta el miércoles de la siguiente semana, las temperaturas máximas se estima entre los 37 y los 39 grados centígrados, mientras que las mínimas oscilarán de los 24 a los 26 grados centígrados.
Ya a partir del jueves de la semana entrante, vuelven las temperaturas superiores a los 40 grados centígrados, pero solamente será ese día, porque el SMN estima que a partir del viernes 19 el termómetro oscilará entre los 37 a 39 grados centígrados como máximas.
Al parecer las temperaturas esperadas durante la canícula, fueron las que sufrió la región durante los meses de mayo, junio y julio cuando al menos durante 60 días se registraron temperaturas superiores a los 40 grados centígrados.