NUEVO LAREDO, TAM.– Desde el mes de mayo se han tenido temperaturas superiores a los 40 grados centígrados. Esto, desde luego, ocurre cada año. Pero, en el actual, han sido más los días con esos registros.
Ya iniciado el mes de julio, mes en que da comienzo la canícula, las temperaturas han estado a tope con hasta 43 grados centígrados que, aunado a la falta de lluvia, causan una sensación tres o cuatro grados más.
Desde este sábado 9 de julio y hasta el miércoles de la semana entrante, las temperaturas máximas podrían rondar entre los 41 y 43 grados centígrados, con una mínima de 26 a 27 grados en la misma escala.
Las autoridades insisten a la población el mantenerse dentro de sus hogares, evitar el exponerse a los rayos del sol si no hay necesidad, el hacer ejercicio también en horas en que el sol ya haya descendido, así como el tomar la suficiente agua para evitar cualquier padecimiento, como puede ser un golpe de calor.
Los pronósticos extendidos no muestran posibilidades de lluvia, aunque sabemos que finalmente es la naturaleza la que decide, y se tienen experiencias de lluvias torrenciales que nunca fueron pronosticadas.
