NUEVO LAREDO, TAM.- Conforme con el paso del tiempo y después de la fuerte crisis sanitaria, al igual que muchos otros negocios, los floristas poco a poco van incrementando sus ganancias, esto gracias a la presencia de clientes que cada día de vistan a sus fieles difuntos, compran arreglos y flores para sus seres queridos.
En vísperas del Día de las Madres, muchos neolaredenses y otros que radican en la vecina ciudad de Laredo, Texas, visitan a sus madres que han fallecido y tienen su morada en alguno de los panteones de esta ciudad fronteriza.
“Pues sí hemos visto que ahí vamos poco a poco de nuevo otra vez, como antes. Ahí vamos poquito a poquito. Desde el sábado han estado viniendo, y sí hemos tenido mejores ventas que en otros tiempos. Principalmente cuando estaba la pandemia, ahí sí nos fue muy mal”, comentó Lorena Garcia Ortegón, propietaria de la florería Yeraldi
De acuerdo a la señora Lorena, quien tiene más de 20 años de vender arreglos florales a las afueras del Panteón Municipal Antiguo, actualmente predominan un promedio de 8 a 9 puestos de flores, ya que con el paso del tiempo han ido retirando sus negocios, principalmente desde que se construyó el puente vehicular.
En florería Yeraldi, los arreglos en su mayoría son artificiales, pero con un toque especial, ya que doña Lorena es quien con sus propias manos les da forma. Además de armar las coronas con acabados especiales, según las solicitudes de sus clientes, considerándose el puesto más económico, ya que sus precios van desde los 50 hasta los 600 pesos, pero según el arreglo y su tamaño.
En vísperas del día de las madres, las flores naturales son muy pocas las que se ven en los puestos que sobreviven. Posiblemente no sea temporada, o el consumo ha ido disminuyendo, esto ya que se pudo ver flores naturales en máximo tres locales, con precios que van desde los 150 hasta los 500 pesos o más, según la flor que se requiera por el cliente.
