CIUDAD DE MÉXICO.-La Auditoría Superior de la Federación (ASF) determinó que a través del programa Jóvenes Construyendo el Futuro, de la Secretaría del Trabajo (STPS), se canalizaron recursos a personas fallecidas y a supuestos becarios que eran trabajadores de dependencias públicas y empresas privadas, lo que va en contra de las reglas de operación.
En el informe de la Cuenta Pública 2020, la Auditoría determinó que quedan pendientes por aclarar más de 28 millones de pesos de este programa.
Según el análisis de la ASF, de la revisión de los pagos al IMSS por concepto del servicio del Seguro Médico por participar en el programa Jóvenes Construyendo el Futuro se determinó que 17 mil 283 personas por las que se realizó el pago al IMSS por un monto de 3.1 millones de pesos, de las cuales no se demostró que se capacitaron en un centro de trabajo participante del Programa Jóvenes Construyendo el Futuro, y además no se localizaron en el Padrón de beneficiarios de dicho programa.
También se constató que se realizaron pagos a 38 beneficiarios, 8 que fallecieron en 2019, es decir, antes de las fechas de pago realizadas en el ejercicio 2020, y 30 beneficiarios que fallecieron entre los meses de enero a octubre del ejercicio fiscal 2020.
Además se identificaron como becarios del programa Jóvenes Escribiendo el Futuro a mil 315 beneficiarios que se encontraban estudiando al mismo tiempo que recibieron pagos por 19 millones de pesos del programa Jóvenes Construyendo el Futuro, en incumplimiento de las reglas de operación del programa.
‘Se pagaron apoyos por un millón 194 mil pesos a beneficiarios que se identificaron como trabajadores en dependencias públicas y empresas privadas durante el mismo periodo de capacitación, por lo que se encontraban trabajando en incumplimiento de las reglas de operación del programa’, señaló la Auditoría.
