NUEVO LAREDO, TAM.- Es PEMEX el que incrementa o disminuye los precios de los combustibles; el sector gasolinero considera que los ajustes en los precios de las gasolinas pueden reducirse o aumentarse sorpresivamente.
Los empresarios gasolineros compran los combustibles en los precios establecidos por Hacienda y PEMEX, y esos precios incluyen los costos que agrega PEMEX por el traslado, almacenamiento y distribución hacia las estaciones de servicio.
José Luis Palos Morales, presidente de la Asociación de Gasolineras de Nuevo Laredo, explicó que los concesionarios o dueños de las gasolineras venden las gasolinas Magna, Premium y diesel conforme a los precios establecidos por Petróleos Mexicanos (PEMEX), los cuales son resultado de una combinación de factores, como tipo de cambio peso-dólar, precios internacionales del petróleo y el IEPS.
En las dos semanas recientes, consideró que el comportamiento de los precios no ha variado sino se han mantenido estables, mientras en los meses de abril, mayo o junio se elevaron notoriamente porque así fueron los ajustes por PEMEX.
“Los precios de las gasolinas y diésel pueden incrementarse o también pueden disminuir de una semana a otra, o en cuestión de días. Los precios no son establecidos por los concesionarios de las gasolineras, son precios de PEMEX y son resultado de una combinación de varios factores”, agregó el dirigente.
La reglamentación de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) exige a todas las estaciones de servicio o gasolineras ajustar sus precios desde el comienzo de la jornada, y después mostrar las cantidades en las pizarras electrónicas para ser vistos fácilmente por los consumidores.
El 85 por ciento de las gasolinas que se consumen en México son compradas por el gobierno federal en Texas y son pagadas en dólares por lo tanto el tipo de cambio incrementa o disminuye los precios al consumidor, según se cotización peso-dólar.
Además, el gobierno federal agrega el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), que es el impuesto que se paga por la producción y venta o importación de gasolinas,y es un impuesto indirecto, por tanto, los contribuyentes no lo pagan, sino lo trasladan o cobran a sus clientes, en este caso los automovilistas.
Si el gobierno federal disminuyera el IEPS, el consumidor pagaría menos por el litro de gasolina, coincidieron un analista financiero consultado y Palos Morales, porque el IEPS eleva en promedio 4 pesos el precio del litro de combustible.
