NUEVO LAREDO, TAM.- Presionan al peso mexicano y a la economía mexicana la pandemia del Coronavirus COVID-19, el desplome de los mercados financieros y la caída de los precios del petróleo, por lo que obligan al gobierno federal a aplicar medidas económicas, consideró el analista financiero Alberto de León Casso.
Ayer el peso mexicano nuevamente tuvo una jornada complicada frente al dólar, al cerrar en 24.42 pesos por unidad, un nuevo máximo histórico y representó una depreciación de 2.06 por ciento de acuerdo al Banco de México, mientras en los centros cambiarios el dólar se mantuvo en 20 pesos.
“Estamos viendo que cada país aplica medidas para enfrentar éstas condiciones porque en los mercados financieros persiste mucho nerviosismo y temor. Por eso, el presidente de la república debe aplicar desde ahora, antes de que esto pueda empeorar, medidas financieras y que nos diga números de cuánto piensan destinar ante la contingencia. Y varios organismos empresariales están solicitando incluso medidas fiscales y financieras para apoyarlos ante los daños por el COVID-19”, planteó.
El anuncio del Banco de México de destinar 20 mil a 30 mil millones de dólares para su programa de coberturas cambiarias para respaldar la moneda nacional, consideró De León Casso que fue una buena medida pero se necesitan otras para provocar confianza en el mercado financiero mexicano, como acelerar inversiones en el sector de la construcción y en los proyectos de infraestructura.
