NUEVO LAREDO, TAM.- Las clases virtuales en casa son una buena oportunidad para mejorar el acceso y consumo de alimentos ricos en nutrientes en los menores y jóvenes, aseguró la nutrióloga Karen Reyna.
Por ello, recomendó a los padres de familia tener una variedad saludable que incluya: pepino, jícama, manzanas, fresas, uvas, naranjas, agua, yogurt bajo en grasa, atún, queso en rodajas, entre otros alimentos, ya que todos éstos, ayudarán a evitar alimentos industrializados ricos en azúcares y grasas.
“Si nosotros como papás los enseñamos a comer frutas y verduras, ellos en una vida futura sabrán comer de la misma forma, por el contrario, si los enseñamos a alimentarse mal con comida chatarra, refrescos o jugos industrializados van a tener problemas de obesidad o diabetes”, mencionó.
Comentó que ahora que las niñas y niños están más tiempo en casa, pueden realizar actividades físicas en los espacios que haya en el hogar.
“Algunas actividades físicas que pueden realizar los menores en casa son: bailes, escuchar música de su agrado, saltar la cuerda, jugar avión y si les gustan los videojuegos, es importante que los padres de familia busquen juegos activos, también pueden buscar clases de ejercicio en línea”, mencionó.
La nutrióloga resaltó que en esta modalidad de clases virtuales los padres de familia deberán cambiar sus rutinas de trabajo y de atención a los hijos para apoyarlos en las actividades diarias.
“Tanto padres, maestros y niños están aprendiendo esto juntos, por lo que es fundamental tener paciencia, tanto en sus estudios como en la alimentación”, señaló.
Reyna agregó que es recomendable comenzar despacio para adaptarse y familiarizarse poco a poco con la sana alimentación, principalmente en este periodo de aislamiento.
“Hay que tratar de tener en el plato del niño colores diferentes, le motiva mucho que el plato tenga colores y formas, por el contrario, si el niño ve un plato sin color, no se le va a antojar”, finalizó.