Entre cantos de mariachis y danzas folclóricas los feligreses celebraron al amanecer su aniversario con la tradicional canción de cumpleaños “Las Mañanitas”.
En esta oportunidad los festejos generaron gran expectativa luego de que la cúpula de la Iglesia católica mexicana instó a los criminales a realizar una tregua durante la emblemática celebración en un intento por contener, así sea por un día, el espiral de violencia que golpea vastas regiones de México.
Ajena a esa realidad María Luisa Vázquez Mendoza, un ama de casa de 33 años, arribó a la basílica, ubicada en el norte de la capital mexicana, luego de caminar unas 16 horas desde el vecino Estado de México, una de las regiones más pobladas y con mayores registros de violencia del país.
“Es un gozo que siente el corazón al ver ya tan cerca la puerta (de la basílica). El cuerpo descansa completamente. Ya no se siente ningún dolor ni el cansancio”, dijo emocionada Vázquez Mendoza al relatar cómo por 17 años consecutivos ha realizado la misma peregrinación a pie para honrar a la Virgen de Guadalupe. “Le vengo agradecer un año más de vida y que mi familia se encuentra completa”, comentó.
Al ser preguntada sobre la propuesta de tregua que realizaron las autoridades eclesiásticas, Vázquez Mendoza afirmó que el cese de la violencia no debería ser sólo por un día y que la iniciativa debería servir para “ser un poquito más humanos, más conscientes”.
La Conferencia del Episcopado Mexicano propuso esta semana a los criminales el “cese de la violencia armada y la comunicación hostil” durante las celebraciones de la Virgen de Guadalupe, pero en algunas regiones como el estado sureño de Guerrero, donde operan diferentes grupos delictivos, los festejos se vieron empañados por el asesinato de un magistrado quien fue baleado el miércoles dentro de su vehículo por hombres armados.
A la monumental basílica muchos llegaron caminando o de rodillas y otros montados en bicicletas y automóviles que decoraron con cruces e imágenes de la Virgen, flores y banderas mexicanas.
La alcaldesa de la Ciudad de México, Clara Brugada, dijo el jueves en su cuenta de la red social X, antes Twitter, que 11,5 millones de peregrinos habían visitado la basílica.
Entre la multitud iba Ángelo Daniel Tela Alcántara, un carretillero de 27 años que caminó varios kilómetros desde el estado central de Puebla para “cumplirle una promesa a la virgencita… “Estoy aquí para honrarla”.
Según la tradición, la virgen morena se apareció en 1531 al indio Juan Diego y su imagen quedó impresa en el ayate o manto que vestía el campesino y que hora se exhibe en la basílica. El papa san Juan Pablo II canonizó a Juan Diego en 2002.
Muchos que han hecho peticiones visitan a la Virgen el 12 de diciembre en señal de agradecimiento y recorren el último tramo hasta la basílica descalzos, de rodillas o gateando.
“Aquí estoy porque se lo prometí por mi mamá”, dijo casi exhausto Christofer Hernández, un comerciante callejero de 29 años, mientras iba a gatas por la explanada frente a la iglesia.
Otro devoto, Arturo Rivas, prefirió recorrer en su bicicleta, con otras 200 personas, más de 100 kilómetros desde el estado central de Tlaxcala hasta la capital para sumarse a la multitudinaria celebración religiosa.
“Francamente nos emociona porque año con año venimos y es lo que nos inculcaron nuestros papás”, afirmó Rivas al recordar cómo por 36 años ha visitado a la “virgencita” en su cumpleaños.
