CHIGNAHAPAN.- Cuando la familia Rosete Guzmán se contagió de Covid-19, se vio en la necesitad de apelar a la solidaridad de sus vecinos para salir adelante.
El primero en enfermar fue el padre, Euscencio Rosete; después se contagiaron su esposa, María Cristina Guzmán, y sus dos hijos, de ocho años y nueve meses de edad.
Ante esa situación, colocaron letreros en la ventana de su vivienda para pedir ayuda y conseguir alimentos y medicinas.
Sus vecinos y las autoridades han respondido.