NUEVO LAREDO, TAM.- Hace un año el precio del diésel fue de 19.95 por litro, y hoy las estaciones de servicio muestran precios promedios entre 18.80 y 17.95 pesos, por lo que sigue como uno de los principales gastos para las empresas del autotransporte de carga, por eso piden un esquema fiscal para enfrentar el costo.
En septiembre de 2019, la Comisión Reguladora de Energía (CRE) informó que el litro de diésel se vendió en estaciones de servicio al público en 21.10 pesos en promedio a nivel nacional, mientras que en agosto de 2018 costó 20.05 pesos en promedio, y en Nuevo Laredo el precio promedio en aquélla fecha fue de 19.95 pesos.
Eduardo Lozano Guajardo, delegado de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (CANACAR) en Nuevo Laredo, sostiene que el sector transportista ha sido perjudicado por los constantes incrementos en el precio del diésel porque los empresarios gastan más del 35 por ciento de sus recursos en el consumo de combustibles, y no existe un esquema fiscal que les permita amortiguar ese gasto.
Desde 2016, la CANACAR considera que se debilitó la capacidad económica de las empresas transportistas por el constante incremento en los precios de los combustibles, y porque se sumaron otras problemáticas como el incremento en el costo de las pólizas para asegurar los camiones de carga, que son robados en determinadas carreteras del país.
En enero del 2017, mediante un desplegado publicado en periódicos de la Ciudad de México, la CANACAR urgió al gobierno federal a analizar propuestas para afrontar las consecuencias del incremento desproporcionado en los precios de los combustibles.
En aquél desplegado, la CANACAR propuso un esquema, que consistió en repartir el costo del incremento en toda la cadena productiva, incluyendo al gobierno federal, y no descargar todo el efecto sólo en uno de los eslabones, sin afectar las finanzas públicas.
Lozano Guajardo explicó que la mayoría de las empresas transportistas acuerdan con sus clientes ajustes a las tarifas en enero de cada año y esos ajustes no rebasan la inflación, pero sin duda se ha reducido el margen de ganancias entre todas las empresas, sean pequeñas o grandes.
El diésel es el combustible que moviliza los camiones de carga para trasladar las mercancías de una ciudad a otra por las carreteras del país, así como por las aduanas localizadas en la frontera norte.
De ocurrir fallas técnicas en el sistema aduanero en lado mexicano o en caso de realizarse revisiones estrictas en la aduana de Laredo,Texas, los choferes de los camiones de carga pueden permanecer hasta 3 horas en las filas, lo que consume más combustible.
