MEXICALI.- El presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) en Mexicali, Alberto Sánchez Torres consideró que Baja California vive una crisis energética que se agrava cada año y deja pérdidas económicas incalculables y que inhibe la inversión.
El líder empresarial consideró que las causas son el abandono de las gestiones federales para promover fuentes de energía públicas propias en la entidad y la falta de inversión en las existentes, así como priorizar el capital privado que benefició sólo a Estados Unidos.
“Podemos decir que esta situación está sobre alfileres, y que cualquier daño que se pueda presentar a la actual infraestructura, de generación (de energía) operante, sería algo catastrófico”, expresó en entrevista.
“Definitivamente es una crisis energética, previo a la pandemia, como Canacintra Mexicali, teníamos pensado hacer reuniones en la Ciudad de México, precisamente para darle solución a este tema, pero vino la contingencia, el cierre de las dependencias federales ha impedido hacerlo, y esto ya nos rebasó”.
Grupo REFORMA publicó hoy que un creciente déficit de energía eléctrica en el Estado provocó que la población de Tijuana quede sin agua potable de manera regular, y forzó a 15 industrias de Tijuana y Mexicali a dejar de operar en horas pico.
Sánchez Torres resaltó que parte del Protocolo Correctivo, determinado por el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace), establece la jerarquización sobre los cortes o desconexiones que se harán al momento de un desabasto de electricidad.
“Y esa es la preocupación del sector industrial, porque la prioridad número uno es desconectar a la industria, entonces el impacto económico que puede traer eso es muy grande”, mencionó.
Abandono y sin planes a futuro
El presidente de Canacintra Mexicali subrayó que hay una urgencia por nueva infraestructura pública que permita tener mayor certeza sobre la energía en el Estado, sin embargo, ni siquiera hay planes en el corto plazo.
“La urgencia que tenemos es que las decisiones del Gobierno federal, en cuanto a inversión de nueva infraestructura vamos a verlo implementado en un lapso de 3 a 5 años, eso es lo que más preocupa, que las soluciones no son a corto plazo, la verdad es que no hay una buena estrategia por parte de Comisión Federal de Electricidad (CFE)”, lamentó.
“Seguramente ellos traen anotados sus proyectos a futuro, pero no hay una fecha de inicio”.
En tanto, mientras la curva de demanda de energía va en ascenso, la gráfica de generación de energía va en descenso, expresó.
“Y en gran medida es por falta de inversión y falta de mantenimiento, si a esto le sumas que al paso de los años no se han hecho inversiones para nuevas plantas generadoras, es una fórmula matemática muy sencilla para saber cómo estamos ahorita”, criticó.
“Una de las plantas que más genera energía es la Geotérmica de Cerro Prieto, en sus buenos años generaba alrededor de 600 megawatts”, ejemplificó, “ahorita está en 300, entonces pues obviamente ahí estamos viendo la gran causa de lo que nos tiene así”.
Los únicos proyectos en los últimos años, estableció, han sido para plantas de energía privadas que exportan el 100 por ciento a Estados Unidos.
“Esto lo podemos ver con la planta eólica en La Rumorosa (Municipio de Tecate), las plantas de La Rosita, en Mexicali, que son puro capital privado, y la energía se envía a EU”, refirió.
El parque eólico Energía Sierra Juárez, de las empresas Ienova e Intergen, en la montaña de La Rumorosa, inició operaciones en el 2015, con una inversión de 300 millones de dólares y con capacidad para 155 megawatts, los cuales se trasladan a San Diego Gas and Electric (SD&E).
