LOS ÁNGELES.- La aglomeración de pacientes con Covid-19 es tan grave en los Los Ángeles que este martes se excedió la capacidad del Hospital Comunitario Martin Luther King Jr. casi únicamente con enfermos por el virus.
El nosocomio, ubicado en la parte sur de la metrópoli californiana, el cual tiene una capacidad para 131 pacientes, reportó internados a 215, 135 de ellos con coronavirus, indicó Jeff Stout, jefe interino de enfermería y operaciones del hospital.
La situación en el Martin Luther King Jr. es un reflejo de lo que sucede en los hospitales al interior del condado más grande de Estados Unidos, donde la exponencial escalada de contagios por Covid ya ha abrumado al personal sanitario.
Además, también se ha alertado por una escasez de oxígeno médico.
Stout refirió que el hospital estaba en proceso de finalizar sus estándares de atención a crisis, pautas para racionar el tratamiento a los pacientes cuando se notifica insuficiencia de personal, equipos y medicamentos.
“Todavía no hemos llegado (a esa situación)”, sostuvo Stout. “Todos los días, cada hora, tratamos de evitar ir a la atención de crisis. El objetivo final de la atención de crisis es nunca llegar allí”.
Las hospitalizaciones en Los Ángeles no han dejado de subir diariamente. Este martes se estableció un nuevo récord con casi 8 mil hospitalizados totales. Más de una quinta parte de dichos pacientes, según los mandos regionales, han sido internados en unidades de cuidados intensivos.
Conjuntamente, se ha explicado que el condado –en cuyo territorio reside la cuarta parte de los 40 millones de habitantes de California– ha dado cuenta del 40% de las 27 mil muertes por coronavirus en la entidad.
Debido a las celebraciones y reuniones que los ciudadanos de EU y de gran parte del mundo llevaron a cabo por Navidad y Año Nuevo, pese a las indicaciones de evitar este tipo de eventos, se espera que la cifra de infecciones y, por consiguiente, de hospitalizaciones, suba aún más en sitios como Los Ángeles.
Las regiones del Valle de San Joaquín y el sur de California han sido las más afectadas dentro del estado. En ambos lugares ya no hay más capacidad en las UCI para tratar a enfermos de Covid.
Rais Vohra, funcionario de salud interino del condado de Fresno, enunció que los trabajadores sanitarios se han preparado para escaladas de transmisiones y defunciones a raíz de las fiestas decembrinas.
“Estoy muy preocupado de que veamos un aumento en el número de hospitalizaciones y muertes”, comentó.
Los hospitales del condado de Los Ángeles han tenido que declarar un “desastre interno” y cerrar sus puertas en algunas ocasiones porque se han visto completamente rebasados. Esto ha derivado en situaciones en las que ambulancias han tenido que esperar hasta 8 horas para dejar a los enfermos en los centros de atención.
A los equipos de ambulancias en el condado se les ordenó el lunes que dejaran de transportar a los pacientes que no pudieran resucitar en el campo.
Sobre esto, Marc Eckstein, director de sanidad y comandante de servicios médicos de emergencia del Departamento de Bomberos de Los Ángeles, manifestó que la directiva sanitaria de la demarcación ha reconocido que tales escenarios eran “todo riesgo y no ganancia”.
Eckstein explicó que las cuadrillas que –en el marco del repunte de casos de coronavirus– transportan a alguien sin pulso dan a las familias falsas esperanzas, ponen fuera de servicio a la ambulancia y exponen a los trabajadores a la cepa infecciosa.
“Para ser claros, no estamos pidiendo a los socorristas que decidan quién vive y quién muere. Estas son personas clínicamente muertas”, sentenció.
