NUEVO LAREDO, TAM.- Siguen a la baja las importaciones definitivas de vehículos usados americanos en las 8 aduanas de la frontera norte donde se permiten dichas operaciones aduaneras, impactan un tipo de cambio que sigue caro y el pago de impuestos.
Entre enero y agosto de 2020, la importación definitiva de vehículos usados originarios de Estados Unidos fue por la cantidad de 78 mil 494 vehículos por las diferentes aduanas de la frontera norte, con 24 mil 569 unidades menos, que representa una disminución del 23.8 % comparado con el mismo periodo de tiempo durante 2019.
Un agente aduanal dedicado a las importaciones definitivas dijo que ha sido determinante el tipo de cambio porque el dólar se ha mantenido en más de 21 pesos en el transcurso del 2020, además el factor de la pandemia de Covid-19 también ha dificultado las operaciones en las aduanas autorizadas de Nuevo Laredo, Reynosa, Matamoros, Ciudad Juárez, Piedras Negras, Mexicali, Nogales y Tijuana.
El interesado o dueño de la unidad debe pagar el impuesto general de importación (IGI) del 10 por ciento, junto a la tasa del IVA del 16 por ciento, el ISTUV y el DTA.
En tercer lugar, el factor que desanima a los dueños de los vehículos usados americanos es pagar la considerable cantidad de impuestos conforme al listado o tabulador establecido por el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
En cuarto, es que no son fáciles de cumplir los requisitos solicitados por la aduana de Nuevo Laredo y en las aduanas restantes donde se permiten las importaciones definitivas de vehículos usados americanos, como es el certificado de origen, un documento que no entregan las empresas automotrices por lo que expiden una factura.
Hasta el próximo día 31 de diciembre del 2020 en las aduanas localizadas la frontera norte se permitirá la importación definitiva de autos usados americanos conforme al mismo decreto que se prorroga cada año.
La recomendación es que los interesados contraten a un agente aduanal para realizar el trámite, y la diferencia entre un agente aduanal especializado en la importación definitiva de vehículos usados americanos y uno que no lo es, es que el primero tiene mayor conocimiento sobre la información necesaria y los documentos a entregarse ante la aduana, y será más preciso en la clasificación arancelaria para saber cuánto deberá pagarse por el trámite.
