CALIFORNIA.- La disminución de los vientos y el aumento de humedad ayudó a los bomberos que combaten las mortales llamas en Oregon y California, pero decenas de personas seguían desaparecidas y las autoridades temían que el fuego pudiera dejar más víctimas.
En California se ha confirmado la muerte de 9 personas, incluyendo un adolescente de 16 años, desde que inició el fuego por relámpagos en semanas pasadas.
En Oregon, las autoridades no han dado un balance oficial, pero se reportó el deceso de al menos ocho personas.
El director de manejo de emergencias de Oregon dijo que los funcionarios se estaban preparando para un posible “evento de muerte masiva” y que el jefe de bomberos del estado fue puesto abruptamente en licencia administrativa.
En California, el humo que pintó el cielo de naranja también ayudó a los equipos a acorralar el incendio más mortífero del año en el estado.
El humo ayudó a bloquear el sol, reduciendo las temperaturas y aumentando la humedad, dijeron las autoridades.
Dos grandes incendios amenazaron con fusionarse cerca de la parte más poblada de Oregon, incluidos los suburbios de Portland.
Más de 40 mil habitantes de Oregón han sido evacuados y alrededor de 500 mil tenían orden de huir de sus hogares.
La mejora del clima ayudó a los esfuerzos en tierra después de días de fuertes vientos, calor y poca humedad.
“Ayer nos ayudó bastante el viento”, dijo Stefan Myers, del equipo de información sobre incendios del estado.
Casi 500 bomberos estaban trabajando en los incendios cerca de Portland, que estaban separados por unos cuantos kilómetros.
El terreno accidentado entre ellos limitó los esfuerzos para contener las llamas, dijo Myers.
Si los incendios se fusionan, podrían generar suficiente calor para enviar brasas a miles de pies en el aire, potencialmente encendiendo otras áreas.
El fuego ya había consumido cerca de más de 3 mil 880 kilómetros cuadrados en Oregon durante los últimos días, casi el doble del tamaño de un año típico y un área más grande que Rhode Island, dijeron las autoridades.
En tanto, en California, casi 15 mil bomberos estaban luchando contra 28 incendios forestales, aunque 24 se produjeron el jueves y se contuvieron rápidamente.
Buscaban además a 19 personas desaparecidas.
