Nuevo Laredo, Tam.- Como si ya fuera parte del paisaje, la Unidad de Especialidades Médicas del Centro de Atención Primaria en Adicciones (UNEME-CAPA) labora frente a un añejo problema de aguas negras.
Las familias y trabajadores que acuden a este centro médico ubicado en Privada Pedro Pérez Ibarra y Bulevar Dos Laredos, deben soportar y respirar los malos olores que emanan de las aguas residuales que brotan de una alcantarilla ubicada justo frente a la UNEME-CAPA.

El área afectada es un tramo grande, a grado tal que abarca el estacionamiento frontal de este edificio y el carril que va de sur a norte.
Ello obliga a los conductores a usar el carril de norte a sur, para no encharcarse en las aguas residuales y con ello no llevarse el auto manchado ni con olores desagradables.
Esta situación representa además un peligro de accidente vial y se agudiza cada vez que se ubica la pulga en este sector los días lunes y viernes, sorteando esta situación quienes pasan por este sitio.
“¿Vienen de Comapa?, tomen fotos para ver si así sí vienen a arreglarlo. Tenemos meses así”, dijo un ciudadano que salió del edificio UNEME-CAPA, al ver la presencia de personas videograbando y tomando fotos de este problema de salud ubicado frente a un edificio médico.

Además de ello, la banqueta de esta área está bloqueada con escombros, bolsas de basura y llantas, que potencializan los riesgos a la salud, al convertirse en focos de infección ya en estos momentos.
Cabe hacer mención que por esta vía circulan una gran cantidad de automóviles y personas, ya sea porque van al tianguis, por necesidad de usar esta ruta, por ir al UNEME-CAPA o por acudir a trabajar a esta zona industrial.

Los ciudadanos que usan esta vialidad, como el que habló en un live realizado por Líder Web este miércoles, demandan a las autoridades locales que atiendan el añejo problema de salud frente a una unidad médica.


