BERLÍN .— Activistas alemanes contra el cambio climático, mejor conocidos por paralizar el tráfico pegándose a los caminos, protagonizaron el viernes una inusual protesta al marchar por Berlín y provocar congestionamientos en algunas partes de la capital.
Miembros del grupo Last Generation han bloqueado el paso en las carreteras de toda Alemania en varias ocasiones durante el último año como parte de un esfuerzo para presionar al gobierno para que tome medidas más drásticas contra el cambio climático. Varias veces se han pegado al asfalto, causando la ira de los automovilistas y provocando acusaciones de extremismo por parte de algunos políticos conservadores.
En la protesta del viernes, cientos de activistas se congregaron en una importante autopista del este de Berlín para luego marchar lentamente hacia el centro de la capital alemana, cantando durante el recorrido. La policía trató de retirar a los manifestantes del camino pero más tarde aceptó permitir que la marcha continuara en una ruta establecida.
Esta semana, el grupo dijo que sus miembros intensificarán sus acciones en los próximos días y tratarán de ‘paralizar pacíficamente la ciudad’.
Last Generation busca que Alemania deje de utilizar todos los combustibles fósiles para 2030 e implemente medidas a corto plazo, como imponer un límite de velocidad de 100 kilómetros por hora (62 millas por hora) en las autopistas como una manera para reducir las emisiones producidas por el transporte.
El ministro de Transporte, Volker Wissing, que ha rechazado la idea del límite de velocidad, planea reunirse con los activistas el 2 de mayo, de acuerdo con su portavoz. Ha criticado duramente al grupo por sus bloqueos anteriores.
