NUEVO LAREDO, TAM.- A pesar del difícil año que se ha vivido, los negocios no contemplan la posibilidad de cerrar sus puertas, aun cuando muchos apenas sobreviven.
Cuando apenas se viven momentos de reactivación, hay situaciones que se presentan en la ciudad que obliga a los vecinos del norte a dejar de venir, comentó Eligio Obeso Castro, propietario de la óptica La Central.
“Pero igualmente de improviso llegan muchos visitantes del lado americano, y eso ha permitido mantenernos vigentes, aunque hay que reconocer que si ha aumentado el número de personas que vienen a ocupar de nuestros servicios, pero igualmente al ser personas muy conservadoras si vienen con temor, debido a que antes de cruzar el puente les dicen que apenas cruzando serán asaltados”, comentó Obeso Castro.
Pero finalmente es la necesidad del servicio de la óptica o de un médico lo que los hace venir, además de que los precios son muy diferentes en ambas ciudades, indicó.
Una consulta aquí les cuesta 100 pesos, mientras que allá tendrán que desembolsar 65 dólares, unos lentes que aquí tienen un costo mil pesos, allá valdrían aproximadamente 200 dólares, aseguró.
“Finalmente hay que alabar la decisión que tomaron de cerrar los puentes internacionales, eso ha permitido que el consumo local aumente y pocos negocios han cerrado sus puertas, ojalá y las personas entiendan que lo mismo que traen de Estados Unidos, aquí lo encuentran”, concluyó.
