La plataforma de criptomonedas estadounidense Coinbase ya es una empresa más en el Nasdaq. Sus títulos cotizan en torno a los 300 dólares tras un máximo en los 381 dólares durante sus primeras horas en bolsa.
En 2020 sus ingresos alcanzaron los 1.300 millones de dólares, más del doble que en 2019, mientras que sus beneficios fueron de 322 millones, frente a unas pérdidas de más de 30 millones en 2019.
Para muchos inversores, Coinbase es la puerta de entrada al mundo de las criptomonedas. La salida a bolsa de la plataforma con la que muchos inversores compran y venden sus criptodivisas es un paso más hacia la aceptación de las criptomonedas entre los inversores tradicionales. Dicho de otro modo, Coinbase resulta atractiva para los que quieren invertir en criptomonedas de forma segura.
Coinbase genera sus ingresos con las comisiones que cobra por las operaciones que se realizan con este tipo de activos, por lo que su negocio está al alza. Pero también varían con los precios de las distintas criptomonedas. Recordemos que el bitcoin alcanzó un máximo de 63.000 dólares coincidiendo con el debut de Coinbase.
Así las cosas, ahora que se ha pasado el boom de la salida a bolsa, los inversores deben valorar si Coinbase es una buena empresa en un buen sector para poner su dinero. Coinbase depende de que el mercado de las criptomonedas se mantenga al alza en cuanto a operaciones, que es de donde obtiene sus ingresos.
Coinbase no irá a la quiebra si caen el bitcoin o el Ethereum siempre y cuando haya mucho movimiento de compraventas, pero siempre le irá mejor con criptodivisas al alza. Es un bróker de criptomonedas. Por lo tanto, los inversores deben valorar si su mercado crece o no y si la competencia de otras plataformas que cobren menos comisiones son un peligro para Coinbase o no.
Recuerda que invertir en criptomonedas es complicado porque se trata de un mercado de elevada volatilidad. Los mejores brokers online ofrecen la posibilidad de invertir en criptomonedas mediante instrumentos financieros que las hacen más accesibles. Pero para los inversores tradicionales se trata de activos tan volátiles e imprevisibles que no merecen la pena.
En ese sentido, Coinbase puede ser una puerta de entrada al mundo cripto para los inversores tradicionales. Se trata de una empresa cotizada en el Nasdaq, regulada y controlada que se beneficia de un mercado cada vez más grande y atractivo como son las criptomonedas, pero con una volatilidad menor y con unas valoraciones y comparables que se pueden entender.
Sin embargo, Coinbase no es una criptomoneda. Para quienes ya invierten en criptodivisas, Coinbase no es rentable porque no genera las oportunidades que generan las criptos. Es una puerta de entrada al mundo cripto, pero no se comportará como una criptomoneda.
Con Coinbase se puede establecer el paralelismo con un bróker online, que se beneficia de que se mueva mucho dinero en los mercados bursátiles, pero no tanto con una petrolera, que sufre cuando el petróleo cae. Coinbase ganará cuando el bitcoin o el ethereum suban, pero también cuando bajen.
Coinbase sufrirá cuando lleguen más competidores que le obliguen a bajar sus comisiones o cuando una mayor regulación reduzca el número de criptodivisas o el de operaciones sobre ellas. Ya hay brokers regulados y de absoluta confianza compitiendo por el mercado de las criptodivisas.
Para ganar dinero en el mercado de las criptomonedas no necesitas comprarlas y mantenerlas en una cartera virtual como la de Coinbase. Es caro. Basta con comprar CFDs, con un buen bróker regulado, que es una manera más económica de hacerlo.