NUEVA YORK.- Ford ha comenzado a retirar más de 850 mil automóviles en Estados Unidos debido a que la bomba de combustible de baja presión de los vehículos puede fallar, lo que podría provocar un paro en el motor durante la conducción, aumentando el riesgo de accidentes.
El retiro cubre una amplia gama de vehículos de las marcas Ford y Lincoln fabricados en los últimos años. Entre ellos están ciertos Ford Broncos, Explorers y F-150s, así como Lincoln Aviators y Navigators, según documentos publicados esta semana por la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA, por sus siglas en inglés).
Ford planea enviar cartas de notificación a los propietarios afectados a partir del lunes 14 de julio, para advertir sobre los riesgos de seguridad relacionados con la posible falla de la bomba de combustible. Sin embargo, un remedio aún está “en desarrollo”, señala el informe de retiro de la NHTSA.
Hasta el momento, no se sabe si había una estimación de cuándo estaría disponible una solución. Pero en el informe de retiro de esta semana se indica que los propietarios recibirán una carta adicional con instrucciones para llevar su automóvil a un concesionario autorizado para ese servicio y que no habrá ningún cargo.
The Associated Press se puso en contacto con Ford el jueves para obtener más comentarios.
El fabricante de automóviles, con sede en Michigan, no tiene conocimiento de ningún accidente o lesión relacionados con este retiro, se indica en el informe de esta semana. Pero los propietarios deben estar atentos a posibles advertencias. Antes de la falla de la bomba de combustible, los clientes podrían experimentar un bajo rendimiento del motor, como una luz de verificación del mismo, o una disminución de potencia.
La falla de la bomba de combustible es “más probable que ocurra” durante el clima cálido o si hay poco combustible en el tanque, se indica en el informe. Y la pérdida de presión y flujo de combustible puede ser provocada por la contaminación interna de la bomba de chorro del automóvil, entre otros factores. Ford también identificó cambios de proveedor durante una revisión del proceso de fabricación, se agrega en el informe.
La empresa estima que el 10% de los 850.318 vehículos que ha comenzado a retirar en Estados Unidos presentan este riesgo en la bomba de combustible. El retiro cubre ciertos Ford Broncos, Explorers y Lincoln Aviators de los modelos 2021 a 2023, además de los vehículos F-250 SD, F-350 SD, F-450 SD y F-550 SD de los modelos 2021 a 2023. También se ven afectados algunos Lincoln Navigators, Ford Mustangs y F-150s de 2021 a 2022, así como algunas Expeditions de 2022.
