La presidenta del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, Claudia Ruiz Massieu, estará este sábado en Victoria y los priistas esperan que la visita permita establecer el futuro inmediato del partido.
En días pasados el dirigente estatal del PRI, Sergio Guajardo Maldonado estuvo en Nuevo Laredo, pero no se avanzó en el tema del futuro del partido en la ciudad.
Por lo pronto, los priistas esperan que primero se defina quién es el nuevo dirigente estatal y después vendrán los cambios en los municipios, bajo la premisa de que la sucesión tiene que ser por consenso para garantizar que todos los sectores y grupos puedan opinar.
Que juntos acierten o se equivoquen, pero que sea una decisión colegiada, no que luego se impone desde arriba, se falla, y la falla se la quieren endilgar a todos.
Uno de los temas pendientes es el del financiamiento del partido, en el cual hay opiniones que van desde hacer rifas, solicitar cuotas voluntarias a la militancia, pasar la charola con un grupo selecto de militantes y simpatizantes, entre otras propuestas.
Por cierto, que Sergio Guajardo nunca ha dado la cara a la militancia de Nuevo Laredo. Hasta ahora ha optado por reuniones privadas, para evitar la presencia de inconformes que puedan reclamarle su actuación al frente del partido. Tiene miedo.
Es una lástima su posición. Un líder enfrenta a simpatizantes y adversarios por igual. Es lo menos que puede hacer, máxime que nadie lo obligó a tomar la dirigencia del PRI. El solito la buscó.