Nataly García Díaz no asume aún la presidencia municipal de Díaz Ordaz y ya está dando de qué hablar porque anunció que buscará cambiarle el nombre a ese pequeño municipio.
Su argumento es que Gustavo Díaz Ordaz fue un asesino porque autorizó acribillar a cientos de estudiantes en la tarde-noche de aquel 2 de octubre, en Tlatelolco, que dejó un saldo de por lo menos 300 muertos y centenares de detenidos. Y que el Municipio lleve ese nombre, es un horror.
La historia nacional está plagada de mitos, leyendas…
Siempre será sano revisar la historia para conocer a nuestros héroes y villanos como eran en realidad, con defectos y virtudes. Pocos quieren recordar que cuando Agustín de Iturbide entró el 27 de septiembre de 1821 a la Ciudad de México, los habitantes lo recibieron con una lluvia de flores, música, vivas.
Y cuando Porfirio Díaz dejó el país, en mayo de 1911, para ya no volver, la gente lo despidió con vivas y bendiciones. Y no se diga de Antonio López de Santa Ana, que hasta lo glorificaron en el himno nacional. Ellos tres son los villanos favoritos de la historia oficial, pero en vida se les dio trato de héroes.
Y qué decir de Don Benito Juárez cediendo la soberanía nacional a los Estados Unidos entregándole a perpetuidad el derecho de tránsito por el Istmo de Tehuantepec. Y Madero el ingenuo, el iluso, el soñador, el chiflado que ganó una revolución y se rindió ante el porfirismo y traicionó al movimiento armado.
Y así podemos hablar de un Ricardo Flores empeñado en hacer la revolución desde los Estados Unidos; de un Zapata intransigente, convencido de que solo él tenía la razón; de un Calles que mandó matar a su mentor Obregón; de un Cárdenas que despreció a un radical como Múgica y prefirió a un ultraconservador como Ávila Camacho que destruyó su obra revolucionaria en un dos por tres.
Para conocer la historia no es necesario reinventarla, como lo hace el Presidente. La verdad está en documentos y libros, y es cuestión de buscarlos, encontrarlos y leerlos.
Seguramente, Nataly García encontrará el respaldo de la bancada de Morena en el Congreso Estatal, pero habrá que ver qué opinan los diputados panistas. Su voto se necesita para reformar la Constitución. Cuando lo del 68, la derecha nunca se solidarizó con los estudiantes.
En otro tema, el senador Américo Villarreal Anaya estará éste sábado en Nuevo Laredo para hablar sobre su tercer informe de actividades legislativas.