A una semana de la tromba que golpeó a Nuevo Laredo, el servicio de recolección de basura ya está en franca normalización.
La tromba tiró postes, semáforos, estructuras metálicas, árboles, dañó el pavimento y esto provocaba que los camiones recolectores tuviesen dificultades para transitar por calles y avenidas.
La basura se incrementó de 2,600 toneladas diarias a 3,600 durante los últimos días, lo que hizo que la empresa Veolia ampliara los horarios de trabajo tanto con los camiones recolectores como en el relleno sanitario.
El presidente municipal Arturo Sanmiguel Cantú ha estado al pendiente de que se atienda la recolección de basura y desechos para que no se acumule en las casas y evitar el riesgo de problemas de salud.
La empresa también colaboró en la recolección de ramas de árboles destinando un camión para ese fin.
Por otra parte, una de las ofertas de campaña de la candidata del PAN, Yahleel Abdala, es la construcción de una clínica municipal de salud donde se ofrezcan consultas de especialistas y cuente con un banco de medicamentos que garantice que los enfermos puedan seguir el tratamiento que se les recete. Esta clínica sería fabulosa.
En otro tema, la candidata del PRI, Cristabell Zamora Cabrera, fue recibida con entusiasmo y alegría por una CTM que conforme pasa el tiempo se ha ido adelgazando en presencia y poder. Para nada se parece a aquella CTM que imponía candidatos a la alcaldía, diputaciones, regidores y todavía le alcanzaba para recomendar funcionarios federales, estatales y no se diga los municipales. Esos tiempos quedaron para la anécdota. A Cristabell le tocan otros tiempos.