La muerte de la reina Isabel II de Inglaterra tomó por sorpresa a su círculo más cercano y al mundo entero. Días previos a su deceso, la monarca recibió en el castillo de Balmoral a Elizabeth Truss, la nueva primer ministro de Reino Unido. Si bien, se decía que la reina se encontraba delicada de salud, nadie sospechaba que dos días después, fallecería. Sus familiares más cercanos fueron notificados y todos se trasladaron para despedirla, entre ellos, sus hijos y algunos nietos.
Su muerte se dio en medio de varias polémicas que han envuelto a algunos de sus integrantes. Por ello, hoy, a dos días del funeral de estado oficial de la reina Isabel II de Inglaterra, dedicamos esta columna a aquellos familiares de Isabel II que han dado de qué hablar últimamente.
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Andrés de York acusado de pederasta
Su relación con el magnate Jeffrey Epstein y las acusaciones por parte de Virginia Roberts Giuffre de que tuvo relaciones sexuales con ella cuando era menor de edad fueron razones suficientes para que la reina Isabel retirara a su hijo Andrés, duque de York, su título de alteza real y sus funciones como un miembro activo de la monarquía británica.
Todo sucedió a principio de año, cuando, en medio de la polémica, porque Andrés había sido llamado a declarar a EU por supuesto abuso infantil y violación, la reina decidió apartar a su hijo de los compromisos reales. Además, como buena mamá, desembolsó millones de euros para detener el juicio y que su hijo no fuera llamado a declarar. Luego de las negociaciones, Virginia aceptó el dinero y retiró los cargos contra el duque.
Hoy, Andrés, como lo vimos en los funerales de su madre, no vistió los uniformes reales en todos los eventos y procesiones funerarias, por haber sido retirado de la casa real.
Beatriz y Eugenia interceden, sin éxito, por su padre
A menos de un mes que se convirtiera en el nuevo rey de Gran Bretaña, se reveló que sus sobrinas, Beatriz y Eugenia hablaron con el entonces príncipe Carlos para pedirle que le devolviera a su padre, el príncipe Andrés, sus cargos y títulos.
Según reveló el medio The Sun, el encuentro se dio en Birkhall State, en Aberdeenshire, Escocia, donde las hijas de Andrés hablaron con su tío para ver la posibilidad de que se le devolvieran sus obligaciones como un integrante de la casa real.
A pesar de analizar el caso, el actual rey se negó a intervenir para cambiar la situación de su hermano y se mantuvo firme en respetar la decisión que tomó su madre, la reina Isabel II. Ahora en su nuevo cargo como rey, será en los próximos meses que se sepa si intervendrá por su hermano menor o lo dejará fuera de los compromisos oficiales.
Harry se separa de la familia real
En 2020 el palacio de Buckingham confirmó oficialmente que Harry y su esposa, Meghan Markle, dejaban sus responsabilidades como miembros de familia real británica. La decisión de los duques de Sussex respondía a que buscaban autonomía y comenzar a volverse independientes económicamente a través de proyectos personales. Para entonces, Harry y Meghan ya vivían en California.
A pesar del anuncio, la reina confirmó que, aunque ya no tendrían responsabilidades y deberes como miembros de la Casa Real, seguían formando parte de la familia.
Meghan y Harry firmaron multimillonarios contratos como con Spotify y Netflix y agrandaron la familia, con la llegada de su segunda hija, Lilibet Diana Mountbatten-Windsor.
Meghan exhibe a la familia real
Aunque la relación entre Harry con el resto de su familia, incluido su padre, el actual rey Carlos III; su hermano, el príncipe William, y su abuela, la reina Isabel II, era distante, terminó por fracturarse cuando él y Meghan concedieron una entrevista a Oprah Winfrey.
Durante la charla, Meghan confesó, entre otras cosas, que sufrió depresión al integrarse a la familia, que se sentía atrapada, que tuvo pensamientos suicidas y quizá, lo más polémico, fue que reveló que integrantes de la familia real, no la reina ni su esposo, Felipe de Edimburgo, se cuestionaron sobre el color de piel que tendrían sus hijos. Por tal motivo, ella y Harry prefirieron independizarse.
No volvieron a Reino Unido hasta el funeral de Felipe de Edimburgo, el año pasado.
William y su intento acertado por reconciliarse con su hermano
Gran sorpresa nos llevamos hace unos días, cuando los hijos de Carlos y sus respectivas esposas, considerados los cuatro miembros de la familia real británica más mediáticos en los últimos años, aparecieron juntos.
El encuentro se dio a las afueras del castillo de Windsor, donde se había anunciado la aparición únicamente de William y su esposa Kate. Sin embargo, pasó la hora programada y los duques de Cambridge no hicieron su salida. 45 minutos después, la pareja descendió de su camioneta acompañada de Harry y Meghan.
Según confirmó el Palacio de Kensington, fue el propio William quien invitó a su hermano y cuñada a “limar asperezas” y por la abuela, a aparecer juntos como la familia que son.
Camilla es la nueva reina consorte de Reino Unido
Siempre fue señalada como la amante de Carlos y cargó con ese título por muchos años. A la muerte de Diana de Gales, no contaba con popularidad entre el público, especialmente el inglés. Con los años, logró ganarse el respeto y admiración del pueblo británico. En 2005 Camilla se casó con Carlos y se convirtió en la duquesa de Cornualles, desde entonces se unió a las filas de la familia real. Asumió su papel con dignidad, siempre en segundo plano, discreta y procurando no protagonizar de más.
En febrero de este año la reina Isabel II, como si se tratara de un presagio, compartió uno de sus últimos deseos, que a su muerte deseaba que su nuera, Camilla recibiera el título de reina consorte.
“Cuando, con el paso del tiempo, mi hijo Carlos se convierta en rey, sé que le darán a él y a su esposa Camilla el mismo apoyo que me han brindado a mí. Es mi sincero deseo que, cuando llegue ese momento, Camilla sea conocida como reina consorte”, revelaba la entonces monarca durante los festejos de su último jubileo.
A la muerte de Isabel II, su hijo mayor Carlos se convirtió en el nuevo rey y Camilla asumió su nuevo rol como reina consorte.
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