La tortilla: El primer aumento

Ya empezaron a surgir los aumentos a los precios de los productos básicos, que entrarán en vigor a partir del primero de enero, en que igualmente se pondrá en marcha el incremento al salario mínimo. Nada más para empezar ya se anunció que el kilo de tortilla, que actualmente cuesta 16.50 pesos, se elevará a los 18 pesos, si no es que hasta los 19 y quien quita hasta los 20 pesos. Un verdadero abuso, pero sobre el que nadie puede hacer nada ya que los industriales de la masa y la tortilla se confabulan cuando de aumentar los precios se trata. Y el justificante para esta alza es nada más y nada menos que justamente el incremento salarial, lo cual es más que absurdo.

Y es absurdo porque así como los tortilleros van a elevar su producto bajo la mentalidad de que los trabajadores van a recibir más sueldo a partir de enero, pues la misma idea van a tener los lecheros, carniceros, fruteros, abarroteros y demás comerciantes que ofrecen los variados productos de la canasta básica, y con ello van a pulverizar el aumento salarial, tal y como ha ocurrido siempre. Por eso es que muchos dicen que sale contraproducente que haya alzas al sueldo, pues por lo regular es más lo que se termina gastando que lo que se viene recibiendo. Y todo porque no hay un control de precios, como tampoco hay una dependencia que pare los abusos, pues como ya sabemos, la Profeco es un vil cero a la izquierda.

De reconocerse la intensa labor de la síndica Dorina Lozano Coronado, quien es de las pocas ediles que ha estado acudiendo a su oficina para atender a la gente que requiere de algún apoyo, esto pese a que ya se está en período vacacional. A Dorina se le vio en su oficina tanto el jueves como el viernes, en horario temprano, y aparte por las tardes se dio tiempo de acudir a diversos puntos de su sector para organizar posadas navideñas a sus representados y hacerle algunos obsequios. Bien por Dorina que en lo que a estar al pendiente de las necesidades de los ciudadanos, siempre marca la pauta.

Tal y como año con año sucede, las autoridades de seguridad pública están exhortando a la ciudadanía a no tirar bala en estas fiestas decembrinas, dado los riesgos que esto representa para la población en general. Y el llamado ya no solo es para el 31 de diciembre, en que muchos gustan de darle gusto al dedo bajo el pretexto de despedir el viejo año y recibir el nuevo, sino también para este 24 de diciembre, pues últimamente también hay disparos en la Nochebuena, y pues no hay que ser, hay que ser conscientes, considerar que puede haber chamacos en los patios de sus casas a quienes les puede caer una bala con fatales consecuencias, tal y como ya ha ocurrido en otras ocasiones. Claro está que muchos se pasan por el arco del triunfo tales recomendaciones, pero como quiera no está de más hacer un llamado de conciencia. Recuerden abrazos, no balazos.

Y antes de despedirme con unos chascarrillos, no me resta más que desearles que pasen una Feliz Navidad en compañía de sus seres queridos, y que la dicha y felicidad reine en sus hogares y bla, bla, bla y más bla de todas esas cosas que siempre se dicen en estas fechas, pues eso de desearles que bebas como cosacos, traguen como vikingo, bailes como apaches y se degeneren como romanos, pues no se puede, porque se ve mal, aunque de antemano sé, y sé muy bien, que muchos lo harán jajajaja. ¡Feliz Navidad!

Santa Claus se estaba preparando para su viaje anual de repartir regalos. Como los elfos estaban en huelga, tuvo que hacer horas extra con la lista de regalos. Fue a ver los renos y descubrió que tenía que darles de comer, limpiarles los establos de suciedad atrasada y que, además, cuatro de ellos estaban enfermos, por lo que tenía que llamar al veterinario y el trineo iba a volar demasiado despacio. Fue a ponerse sus pantalones rojos y descubrió que no los había lavado desde el año pasado. Buscó otro par y al ponérselos, descubrió que había engordado 10 kilos. Se peinó la barba y se encontró un pelo negro. Con un encanijamiento tremendo se fue a la cocina a echar un trago y todas las botellas estaban vacías. En ese momento entró un ángel y le preguntó: “Santa, ¿qué quieres que haga con el árbol de Navidad?”

Y esa es la razón por la que se suele adornar los árboles de Navidad con un angelito en la punta.

Una mujer se despierta a las 4 de la mañana y se da cuenta de que su marido no está con ella en la cama. Va hasta la cocina y lo encuentra sentado en silencio, a oscuras, tomando una taza de café. Enciende la luz y ve como el marido se quita una lágrima del ojo mientras sigue bebiendo en silencio.

“¿Qué te pasa querido? ¿Qué haces aquí solo a estas horas de la noche?”

El, girando para mirarla, dice: “¿Te acuerdas hace 20 años, cuando comenzamos a salir juntos, que tú tenías 16 años y yo 20?”

“Claro que me acuerdo”

“¿Y te acuerdas cuando tu padre nos encontró… en el asiento de atrás de mi coche?”

“Sí que me acuerdo, responde ella tiernamente acercándose a él”

“¿Y recuerdas que tu padre me puso la escopeta en el pecho y me dijo que debía casarme contigo o me denunciaba y me pasaría 20 años en la cárcel?”

“Claro cariño, también me acuerdo, Papá siempre tan furioso con mis novios!!… ¿Pero a qué viene eso?”

Mientras se quita otra lágrima que le corre por su mejilla y con la voz quebrándose en un lastimero llanto, el responde: “Pues bien… hoy… precisamente el día de hoy… ¡¡ESTARÍA SALIENDO DE LA CÁRCEL Y SERÍA LIBRE!!”

Llega un hombre muy preocupado con el doctor un día antes de su operación y le pregunta.

-Doctor voy a perder mi pierna.

– Yo le voy a dar su pierna en una bolsa si la pierde es su problema.

Llega Santa Claus a Somalia y le pregunta a los pobres y desnutridos niños, “Jojojojo ¿ya comieron?”

Y los niños responden emocionados “Noooooo”, creyendo que les va a dar de comer.

Entonces el panzón les dice: “¡Ah no, si no comen no hay regalos jojojojo!”

Comentarios, chismes y mentadas de mami en almaniger@gmail.com