¿Valdrá la pena que en el PRI se nombre un dirigente municipal para después cambiarlo, una vez que haya candidato a la alcaldía?
Hay quien sugiere que el cambio en el Comité Municipal se dé hasta que haya candidato presidencial y que entonces este pueda nombrar a alguien de su confianza, para que puedan coordinarse durante la campaña.
Sería lo más sano, para evitar el desgaste que en estos momentos se está presentando.
Ahora que otra vía es designar a un elemento que no tenga aspiraciones políticas en lo inmediato.
El problema es que encontrar a alguien que no tenga aspiraciones en lo inmediato, es similar a buscar una aguja en un pajar.
La mayor parte de los nombres que se citan como prospectos para quedarse al frente del PRI se identifican con determinado personaje, lo que se presta a pensar que actuarían como su subordinado, para que se concrete el proyecto político en el que se trabaja.
Tres de los aspirantes a la dirigencia priista son jóvenes: Juanes Carrizales, Javier Lozano y Rafael Nolasco, apoyados por la CTM, CNOP y CNC, respectivamente.
Los tres traen muchas ganas de trabajar en el territorio, al lado de los ciudadanos. Los tres son autocríticos.
En otro tema, desde este espacio le enviamos nuestras más sentidas condolencias a Alberto Rodríguez Romero por la pérdida de su señor padre. A Beto tenemos un titipuchal de años de conocerlo y juntos compartimos muchas aventuras, en las que siempre prevaleció la camaradería, el respeto y la amistad. Recibe un afectuoso abrazo y te deseamos que encuentres paz y resignación.