Dado a que este es un serial de mis Apuntes de comunicación política (cuarta entrega de cinco) por el hecho tan disruptivo que ocasionó la crisis sanitaria del COVID-19, reitero que no importa en qué región de latinoamérica estés leyéndolos, ya sea en México, en Colombia, o en Panamá, sin especificar una entidad gubernamental en lo particular, muchos están incurriendo en graves errores de su Gobierno, Departamento, o Provincia, en parte originados en consecuencia del mal control que han tenido sus Gobiernos Federales.
Más allá que la estrategia nacional –de cualquier país- sea centralizar todo, o no, las acciones para controlar la crisis provocada por el COVID-19, incluso hasta de las limitantes o atribuciones legales que puedan existir, es claro que muchos han incurrido en errores, por ejemplo, ahora mismo la Fiscalía General de Colombia está indagando a Claudia López, alcadesa de Bogotá DC, por presuntas violaciones a las medidas tomadas ante la pandemia.
Caso contrario, empiezan a destacar positivamente las acciones que tomaron de cara a la ciudadanía el Departamento de Cali en Colombia.
Durante lo conversatorios digitales que sostuvimos del 16 al 31 de marzo en UNOCI Consultores en Comunicación con diversos expertos internacionales, entre ellos Jorge Aguilera, doctor en Comunicación que vive en Bogotá, nos brindaría la oportunidad de dimensionar los errores que estaban incurriendo y en el nuevo cambio del contexto social que afrontaremos después del COVID-19.
En estos Apuntes destaco tres graves errores, inspirado en el conocimiento de mi maestro Jorge Aguilera en el ITAM y de Pedro Hernández De Rosas, quien fuera especialista del Banco Mundial en Washington, DC.:
- Topicalizar acciones
Al no centralizar el Gobierno Federal las acciones de detección y contención, algunas entidades erraron en no tropicalizar las prácticas exitosas de otras latitudes del mundo donde ya contaban con un avance importante con la pandemia. Entre ellas, adquirir pruebas médicas para detectar el COVID-19, abasto de cubrebocas, así como el oportuno aislamiento.
- Convocar a las fuerzas vivas
Al no convocar el Gobierno Federal a las fuerzas vivas, algunos tampoco lo hicieron desde el inicio de la crisis sanitaria, poniéndolos en la mesa de las decisiones que se tomarán para contener los contagios, creando propuestas para dar soluciones ante los problemas –por ejemplo, productos sanitizantes-, y acordar un frente común para ayudar al empresariado.
- Delimitar la contingencia
Al no contar previamente con un plan de riesgos por la migración, la movilidad doméstica y local se convirtió en el vehículo propagador complicando la mitigación.
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