En algunas horas, el Comité Directivo Estatal del PRI publicará la convocatoria para la renovación de las dirigencias municipales, entre las que se incluye Nuevo Laredo.
Para fines de este mes o principios de marzo ya habrá nuevo presidente del PRI y hasta ahora solo parece haber tres aspirantes, a saber: Adán Hernández, Arturo Peña Treviño y Jesús Valdez Zermeño.
Todo apunta a Jesús Valdez.
El PRI, en la elección del año pasado obtuvo poco más de 10 mil 500 votos, casi nada, si lo comparamos con los 37 mil del 2018 o los 83 mil del 2010.
Asumir la dirigencia del partido en este momento será todo un reto.
Y es que ciertamente si las elecciones fuesen en este momento, el ganador indiscutible sería el PAN teniendo como competidor a Morena y eso de competidor es un decir, porque ya vimos cómo le fue en la elección del 2019.
Cada uno de los partidos sabe lo que tiene que hacer para llegar fortalecidos al 2021.
En otro tema, cayó Emilio Lozoya, ex director de Pemex, a quien se acusa de haber recibido sobornos por 10.5 millones de dólares, a cambio de obras.
A Lozoya lo detuvo la Interpol, en España.
Detrás de Lozoya habría estado Enrique Peña Nieto y ya hay quienes se soban las manos convencidos de que el ex director de Pemex va hablar en contra del ex presidente, lo que daría motivos para que el Presidente tome acciones legales, lo que está por verse, porque hasta ahora hemos visto que la maquinaria de la justicia actúa por consigna, no por un deseo real de aplicarla.
Para los amigos, justicia y gracia (como con Manuel Bartlett) y para los enemigos, garrote vil (como con Rosario Robles), es la consigna López Obrador y por eso no convence.
Cuando a Lozoya se le involucró en el caso Odebrecht, la revista “conservadora” Proceso, como la califica López Obrador, dio información puntual del caso. Hoy las cosas han cambiado para Lozoya.