El deporte mundial, entre guerra y pandemia

“”El deporte es el departamento de juguetes de la vida humana.” Howard Cosell.
El deporte nunca ha estado ajeno a la situación política o social del planeta. Siempre ha sido parte de ella. De una manera u otra se adapta a los tiempos que le toca vivir.
Es increíble como en los últimos dos años, todo el mundo del deporte fue trastocado y afectado por la pandemia del Covid19, primero suspendiendo prácticamente todas las ligas del planeta, amateurs y profesionales y luego adaptándose.
Recuerdan que iba a haber Juegos Olímpicos en Tokio en el año 2020 y tras cancelarse se hicieron al año siguiente sin público y con sedes vacías y además con muchos cuidados sanitarios para evitar contagios.
Las ligas gringas detuvieron sus actividades y solo la NBA regresó en una “burbuja” en la que por más de un mes disputaron el último mes de temporada más playoffs acortados. El resto de las ligas volvió más tarde, pero se llenó de casos positivos, juegos pospuestos, tramposos falsificando certificados covid y una lucha entre provacunas y antivacunas.
No se diga el golf, el tenis, la F1 que cancelaron su temporada. La mayoría de las ligas europeas (y la mexicana) simplemente terminaron el torneo sin campeón.
El mundo cambió y el deporte se adaptó.
Ahora viene otro gran cambio a nivel global. Se desata el conflicto militar entre Rusia y la OTAN por la invasión a Ucrania y seguramente el mundo como lo conocemos no será el mismo.
Por lo pronto, este jueves temprano la UEFA dictó que la final de la UEFA Champions League que se realizaría en San Petersburgo, Rusia, cambiaría de sede, seguramente a algún estadio inglés. Quizá fue en castigo a Rusia como país, pero también por la seguridad de los equipos que llegarán a esa instancia.
Polonia pidió no jugar en Moscú el repechaje al mundial vs Rusia (sería el 23 de marzo) y el otro duelo Ucrania-Escocia (sería el 24 de marzo), sin duda, no forma parte de las cosas importantes para el país ucraniano. Obviamente la liga en Ucrania está suspendida. También se realizaría un Gran Premio de Fórmula Uno y el Mundial de Voleibol.
Hay muchas cosas que no sabemos qué pasarán en esta guerra. Se pensaba que esto se resolvería de una manera diplomática, ya que una guerra realmente no es conveniente para nadie.
Pero ya está en marcha. No creo que escale a una tercera guerra mundial. Escucha eso ¡suena a locura! Pero debemos estar preparados para que EU y la OTAN reaccionen militarmente y que esto afecte la economía global y el miedo de que siga escalando y por ende, aunque por mucho menos importante, el deporte.
INSISTO, no es que el deporte tenga validez en un momento de guerra o pandemia. Pero es innegable que el deporte simboliza lo opuesto a la guerra. Es una competencia fraterna que evoca momentos de paz, que entretiene y enseña el valor de la libertad de actividad a la gente.
Y lo diré. Toda guerra es una estupidez. Espero que este y cualquier conflicto bélico encuentre pronto su final, no por el deporte, sino por alcanzar la paz. El deporte solo será una consecuencia de tiempos mejores y espero que eso llegue pronto.
juanfirst@gmail.com