Es importante precisar que es conocida la “década perdida” al periodo que comprende de 1980 a 1990, en la que se vivieron en latinoamérica diversas crisis eminentemente económicas; aquí los casos más emblemáticos se dieron principalmente en seis países entre otros, por ejemplo, Ecuador que no está incluido como uno de esos casos que ya cayeron en una segunda década perdida. Destaco que en esos seis casos, la situación crítica económica tuvo un impacto político-electoral; en Argentina con el triunfo de Néstor Kirchner todavía hasta nuestros días perdura el movimiento kirchenerista; en Brasil surge la esperanza desde del proletariado con Luiz Inácio Lula da Silva; en Venezuela se instaura la revolución bolivariana con Hugo Chávez continuada hasta la fecha por Nicolás Maduro; mientras que en México por un lado se cocinaba la primera alternancia en la Presidencia de la República.
México cayó en la década perdida por una serie de errores internos efectuados años atrás por el embriagador boom petrolero de 1976 a 1982, periodo en el que creyeron que las carretadas de dinero eran interminables, sin controles presupuestales, sin mecanismos de transparencia, y ni sistemas de fiscalización. Eran los años de los excesos de los gobernantes, pero también cuando se arraigó la corrupción entre los diferentes cotos de poder que serían un lastre para el país.
Creo que la década 2020-2030 es la DÉCADA PERDIDA, porque tiene más componentes que la vivida en 1980-1990; ahora entran en juego crisis económica, social, educacional, salud, y hasta de visión de futuro:
1. Político – electoral
Entre 1980 y 1990 persistió el sistema de partidos asentado en tres grandes ofertas políticas, ahora con Morena existen cuatro principales fuerzas. ¿sobrevivirán ideológicamente como estaban hasta este 2020 o empezarán a trasmutar a otra “cosa”?
2. Educación
Entre 1980 y 1990 no cayó el sistema educativo, incluso la escuela pública fue la columna vertebral para evitar una mayor deserción escolar, ahora que en 2020 ya han cerrado 35 por ciento de las escuelas privadas, mientras muchos alumnos ya no regresaron a la ciclo escolar público ¿retomarán sus estudios cuándo ya tengan dinero?
3. Social
Entre 1980 y 1990 se trató de amainar la brecha entre la pobreza extrema con la clase media, destacando la bajada en las carencias en el acceso de salud de 58.6 por ciento en 2000 hasta 16.2 por ciento en 2018 ¿cómo terminará en 2030 con el mal manejo del COVID19 sumado al colapso del abasto de medicinas?
Menciona Louis Emmerij, quien fuera miembro del Banco Interamericano de Desarrollo, “la lección básica de las décadas pasadas fue olvidada; lo económico y lo social eran una sola cosa. Hay una bomba de tiempo social que late bajo los sistemas económicos aplicados” (Van der Borgh, 1996). En mi opinión, queda más que claro que el país que conocíamos hasta 2019 -con un hecho tan disruptivo en 2020- cambiará diametralmente por una década perdida. ¿Y tú, qué opinas? www.daviddorantes.com
