Recientemente me invitó Armando Cavazos para su podcast que se llama “Cuarto Piso” que está en diversas plataformas digitales incluida FamFlix –debo confesar que no sabía sobre la existencia de este especie de Netflix para la promoción de valores-. La invitación se pactó con veinte días de anticipación, sin percatarme que nunca hubo un acuerdo entre ambas partes sobre el punto central en que giraría la entrevista, días antes pretendí preguntar pero no lo hice.
Entre el día de la invitación de Armando y la fecha de la grabación de su podcast me pasó algo que me pondría a reflexionar. Era un martes en el que tenía saturada mi agenda, en la que me resultó inevitable contar una anécdota personal en cada una de las reuniones, al llegar la noche, como siempre hago una evaluación de lo que hice o de lo que no hice, en ese momento sentí que quizás estaba cayendo ante los demás como que yo pretendía ser un protagonista de todo, esto por mi afán de compartir mis experiencias, buenas o malas; reflexionando concluí que no comentaría más aspectos de mi vida personal.
En los días subsecuentes mi asistente personal –Luis Delfer- me dijo “te noto muy callado ¿todo bien?”, aunque dudé comentarle mi decisión sobre ya no contar mis anécdotas, se lo compartí para que no pensará que estaba molesto con él. Su respuesta fue fulminante para mí porque no esperaba esa reacción “no David, no lo hagas, que no ves que de ahí aprendo”.
Así fue cuando llegó el día de la grabación del podcast de Armando Cavazos, yo con agenda llena ese miércoles no pensaba sobre la entrevista que me harían hasta que nos subimos al automóvil Luis Delfer y yo para irnos a CINTERMEX ahí fue cuando los nervios me invadieron ¿Sobre qué iba a tratar la grabación? Ya había visto algunos episodios por lo que me daba la impresión que serían algunas preguntas personales, pero aniquilé todos los pensamientos quedándome que todo giraría en torno a la pasión que ambos tenemos: comunicar.
Entramos a CINTERMEX, llegamos a los estudios de Base 3, Armando siempre gentil, César listo para grabar, a mi lado en todo momento Luis Delfer, cinco, cuatro, tres, dos, grabando. Todo fluyó muy bien, me sentí como en una conversación de casa, ciertamente todas las preguntas que me hizo fueron a nivel personal, sin darme cuenta terminó siendo un podcast de una hora. En conclusión, fui a una entrevista sin saber el tema central y terminé abriendo mi corazón.
En estos Apuntes te recomiendo: comparte tu experiencia siempre, sin pretensiones y humildemente, que quizás una persona aprenderá de tus fracasos o de tus éxitos, pero sobre todo vas a poner un granito de arena para el camino que otro ser está construyendo para sí mismo.
MAGIA AL COMPARTIR TU EXPERIENCIA:
1. Te libera de emociones negativas, cuando fue algo malo que viviste.
2. Ejercita tu cerebro al recrear esos momentos del pasado.
3. Te haces más consciente para repetir o evitar acciones en tu presente.
4. Propicia más empatía con las personas que te rodean.
5. Quizás, una persona aprenderá de tu vivencia.
Comparte tu experiencia siempre. ¿Y tú, qué opinas? www.daviddorantes.com
