Termina la semana y dentro de todas nuestras tragedias nacionales, tenemos tres asuntos que fueron resueltos, en positivo. a.- Conjurada la revuelta en el Instituto Nacional Electoral. b.- Renovado, estiman para bien, el maltrecho Sistema Nacional de Pensiones y c.- El Avión Presidencial, ahora si, “casi se vende”.
1.- En el primer caso, ahí estás la votación prácticamente unánime. 399 votos a favor, 5 en contra y 5 abstenciones y con ello, la Cámara de Diputados avanza en la elección de los cuatro nuevos consejeros electorales del Instituto Nacional Electoral.
Estarán en sus cargos del periodo del 27 de julio de 2020 al 26 de julio de 2029 la abogada Norma Irene Cruz; Carla Humphrey, ex consejera del Instituto Electoral del Distrito Federal y funcionaria de la UIF.
Martín Fernando Faz, consejero del Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana de San Luis Potosí, además de Uuc-kib Espadas, académico, ex diputado del PRD y especialista en temas electorales.
Los votos hablan de que hubo finalmente un acuerdo político y ya los veremos en funciones; por supuesto si se comportan a la altura de un INE que a pesar de los pesares, ha funcionado como eficaz bisagra democrática.
Así, sin más grillas y berrinches, todo resuelto. Y que alguien guarde en el baúl de los muñecos rotos a personajes que son un fastidio mediático. El caso emblemático en la 4T es sin duda John Mill Ackerman Rose, un académico -autoreducido-, símil de agitador de bebidas alcohólicas.
2.- El número dos, también es un tema que estaba en la agenda de las mortificaciones nacionales. Me refiero al Sistema Nacional de Pensiones y del que se necesitará al menos una década para confirmar su efectividad.
Con esta reformas, la aportación de las empresas se elevaría durante un período de 8 años del 5.15 por ciento al 13,87 %. La cobertura de trabajadores tendrían una pensión garantizada para su jubilación, que se estima aumentaría del 34 por ciento al 82 por ciento.
Una amarre en el que están de acuerdo la federación, el sector privado “en pleno” y los sindicatos, en este caso la CTM.
Así todo desde que en 1997 se crearon las Administradoras de Fondos para el Retiro, que tantos dolores de cabeza han dado a los trabajadores de este país pues a menudo, muchos mexicanos han tenido que quemar sus modestos ahorros para literalmente sobrevivir.
3.- Finalmente lo que sigue de cuento, es el caso del Avión Presidencial TP01, no solo por la pifia de rifa del mismo en el Lotería Nacional, si no porque ahora si, jura otra vez El Presidente, que hay al menos dos postores, obviamente para malbaratarlo.
Uno que habría dado un enganche y otro que dice, que lo cambia por equipo médico. Vaya fantasía, cuando los apoyos siguen siendo bajos, no obstante que, se hayan reducido las protestas de personal en hospitales.
Suponemos y en lo que nos consta, muchos han adquiridos sus propios equipos de respaldo, para evitar contagios y con ellos los riesgos de muerte.
Lo mejor de cada casa…
Y la paradoja política, sigue mientras Andrés Manuel López Obrador, sigue terco sin usar el cubre bocas, prácticamente todos los funcionarios lo están utilizando, pues saben, tienen la certeza de que el virus es real.
En el Tamaulipas, los alcaldes, los diputados, los secretarios estatales, todos están usando equipo básico anti contagio. Los casos de afectados, no es cuento y menos debería de ser chiste de ignorantes.
Habría que hacer ya una lista de todos los enfermos que están en la trinchera política, pues no son pocos y en la semana el Félix Fernando García Aguiar, anunció ser positivo al virus Sars-CoV-2 del Covid-19.
Seguimos viendo a los alcaldes Chucho Nader, Mario López, Alma Laura Amparan y Enrique Rivas, de Tampico, Matamoros, Altamira y Nuevo Laredo; ellos han sido verdaderamente afortunados, pues están sanos, en todos los sentidos.
Nostra Política.- “Sí, tengo familiares enfermos, también desgraciadamente han perdido la vida familiares, como pasa lamentablemente en estos casos”.
No lo dice, pero están en Tampico-Madero.
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