CIUDAD DE MÉXICO.- La Fiscalía federal de México anunció el jueves la apertura de una investigación por el robo de una pintura rupestre y los daños ocasionados en el sitio arqueológico de “La Cueva Pinta” ubicado al norte del país.
La extracción de la pintura rupestre de una mano en tonos rojizos, que es una de las piezas más reconocidas del referido monumento arqueológico, fue denunciada a inicios de mes en el estado norteño de Coahuila por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) tras una evaluación de lugar.
“Durante una inspección por parte del personal del INAH, se constató el daño irreparable causado por la extracción de una figura pintada y el intento de sustracción de al menos otras dos, para lo cual se utilizó, al parecer, una sierra eléctrica, ya que se cortó parte de la pared para sacar una placa con una figura pintada”, dijo en un comunicado la Fiscalía General de la República.
Según las autoridades, las pinturas rupestres, ubicadas en la Sierra de Australia del municipio Cuatro Ciénagas de Coahuila, tienen una antigüedad de entre 500 y 5 mil años, por lo que el hecho es considerado como una “grave afectación al patrimonio nacional”.
La pieza robada formaba parte de un panel con pintura donde hay más de 150 figuras pintadas en las paredes en colores rojo, amarillo, blanco, negro y naranja. En el panel, hay figuras que están superpuestas, lo que sugiere a los especialistas que fueron realizadas en diferentes momentos a lo largo de generaciones.
En México, se han localizado pinturas rupestres en los estados de Baja California Sur, Coahuila, Tamaulipas, Yucatán y en particular en Oaxaca, donde hay una serie de cuevas prehistóricas y refugios rocosos en los que se pueden observar figuras humanas, fauna, flora y figuras abstractas en tonos rojos.
