Nuevo Laredo, Tam.— Justo para iniciar el ciclo escolar 2024-205, el Gobierno municipal retiró los topes que se ubicaban en la Avenida Justo Sierra entre las calles Lincoln y Perú.
En este tramo se ubican tres escuelas, que son un Jardín de Niños, una Primaria y una Secundaria, por lo que había cuatro estructuras reductoras de velocidad que durante años aseguraban que los automovilistas condujeran con mayor precaución.
Esto debido a la alta afluencia de menores de edad y sus padres de familia a la hora de entrada y salida de los centros educativos, sin embargo, todos los reductores fueron eliminados sin tomar en cuenta la seguridad de cientos de alumnas y alumnos menores de edad.
Este lunes, al reiniciar clases, los peatones se encontraron con que no hay topes, así que es más riesgoso cruzar la Avenida Justo Sierra, porque los vehículos no están obligados a reducir su velocidad, lo cual pone en peligro a las y los estudiantes de los tres planteles.
Pese a que eso es reciente, no había este lunes elementos de Tránsito para dirigir la circulación vial.
Los topes ayudan a que los vehículos circulen con respeto a los señalamientos viales, lo que contribuye a la seguridad vial al disminuir las posibilidades de accidentes, especialmente en áreas cercanas a escuelas, hospitales y en general áreas con mucho tráfico peatonal.
Además, conducir donde hay topes promueve una conducción más atenta y cuidadosa, ya que los conductores están conscientes de la necesidad de reducir la velocidad al acercarse a estas estructuras.