SANÁ, Yemen.— Dos soldados de las fuerzas progubernamentales de Yemen murieron en una emboscada armada contra un convoy de Naciones Unidas en el este del país, informó la ONU el sábado.
Según un comunicado de la vocera de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) de la ONU, ambos soldados murieron mientras escoltaban un convoy que viajaba de Seiyun a Marib. Ninguno de los empleados de la OIM, que estaban en una misión humanitaria no especificada, resultó lesionado en el ataque, agregó. No se proporcionaron detalles adicionales sobre el incidente del viernes.
Un líder tribal de la zona y un funcionario de la ONU dijeron a The Associated Press que la emboscada ocurrió cerca del pueblo de Al-Abr, en la provincia oriental yemení de Hadramout. Ambos hablaron bajo condición de anonimato por temor a represalias.
En un comunicado separado publicado el viernes por Saleh Mohammed Timis, teniente general del Batallón de Fuerzas Especiales de Yemen —una rama oficial del ejército con apoyo saudí— los dos hombres fueron identificados como Salme Saeed Qarwan y Salem Mubarak Al-Bahri.
Los agresores no han sido identificados.
El desastroso conflicto de Yemen comenzó en 2014, cuando los rebeldes hutíes respaldados por Irán bajaron de las montañas en el norte y tomaron control de Saná, la capital. En respuesta, una coalición que incluye a Emiratos Árabes Unidos y dirigida por Arabia Saudí intervino en 2015 para tratar de regresar el poder al gobierno reconocido internacionalmente. Desde entonces, el conflicto se ha convertido en una guerra de poder entre rivales regionales de Arabia Saudí e Irán, dejando a unas 150.000 personas muertas y convirtiéndose en una de las peores crisis humanitarias del mundo.
En meses recientes, se han intensificado las luchas internas entre diferentes grupos armados en el este y sur de Yemen, que están bajo control de la coalición saudí. Los enfrentamientos letales han enfrentado con frecuencia a fuerzas respaldadas por Emiratos Árabes Unidos, que actualmente controlan la mayoría del sur de Yemen, y los leales al gobierno reconocido internacionalmente. En agosto, un día de enfrentamientos entre facciones rivales de la coalición saudí dejó 325 soldados muertos en Shabwa, una provincia en el sur.
Al Qaeda también tiene una presencia persistente en el este y sur de Yemen. En febrero, presuntos milicianos de su red global secuestraron a cinco trabajadores de la ONU en la provincia sur de Abyan.
