LONDRES.- El impulso que llevaba Manchester United en la lucha por el título se agotó antes de lo previsto. Y tendrá que reponerse pronto, pues su próximo rival es Arsenal, el líder de la Liga Premier.
Por medio de un tiro libre en los descuentos, Michael Olise impidió que el United hilara su décima victoria y dio el miércoles al Crystal Palace un empate de 1-1.
El United parecía en camino de trepar a la segunda posición luego de un tanto del portugués Bruno Fernandes en la primera mitad.
Pero el gol de Olise en los primeros minutos del descuento dio un final dramático al duelo y dejó frustrados a los jugadores dirigidos por Erik ten Hag.
“Teníamos una ventaja de 1-0. En el segundo tiempo tuvimos mucho margen para matarlos e ir por el segundo gol. Nunca vi que realmente fuéramos por el segundo”, reconoció el técnico Erik ten Hag. “Es difícil decir por qué. Tengo que criticar a mi equipo por no buscar otro gol”.
Pudo ser peor para los visitantes. Wilfried Zaha se escapó hacia el arco antes del silbatazo final, pero el zaguero Aaron Wan-Bissaka intervino para apagar la ocasión de gol.
El United ascendió del cuarto al tercer sitio de la liga. Está igualado en puntos con el Manchester City, que se ubica segundo, de cara al cotejo dominical ante el líder Arsenal, del que le separan ocho unidades.
Sin embargo, Ten Hag carecerá del mediocampista Casemiro para la visita al Emirates Stadium. El internacional brasileño recibió su quinta cartulina amarilla en la campaña, lo que amerita una suspensión.
“Es un jugador realmente importante para nosotros y es uno de los motivos por los que ocupamos esta posición. Pero la última vez, vencimos al Arsenal sin Casemiro. Tenemos que hacerlo de nuevo”, indicó Ten Hag.
Un triunfo el miércoles y otro el domingo habrían dejado a los Red Devils a tan sólo tres puntos de los Gunners. Ahora, si caen, se rezagarán a 11 unidades, con un partido más.
El empate parece una oportunidad perdida por el United, que superó el sábado 2-1 al Manchester City y avivó las esperanzas de una obtención absolutamente inesperada del título.
El equipo de Ten Hag llegó al compromiso luego de ganar sus nueve duelos anteriores en las distintas competiciones y de perder sólo uno desde que el City lo humilló por 6-3 a comienzos de octubre.
Palace llegó a la cancha agobiado por tres derrotas en fila y con apenas una victoria en siete partidos.
