LUBBOCK, Texas, EE.UU. — Un condado de Texas cercano a Nuevo México —donde el aborto es legal— ha prohibido que se ayude a las personas que viajan con el fin de abortar, en una de las formas más recientes en que los conservadores intentan restringir el acceso al aborto desde la caída del caso Roe contra Wade.
El condado de Lubbock es el más grande de los cuatro condados de Texas que ahora han adoptado una versión de la medida, que se aplicaría a través de demandas presentadas por ciudadanos particulares contra personas que ayudan a las mujeres a acceder a un aborto. Se trata del mismo mecanismo legal que Texas utilizó para promulgar una estricta ley sobre aborto en 2021, antes de que la Corte Suprema de Estados Unidos permitiera el año pasado que el estado prohibiera el aborto en prácticamente todas sus causales.
Los comisionados en el condado del oeste de Texas adoptaron la medida con votación de 3-0 en una reunión el lunes, rechazando algunas peticiones de posponer la votación.
Las medidas amplían las ordenanzas municipales que las ciudades del Texas rural empezaron a aprobar en 2019 para prohibir el aborto dentro de sus fronteras, aunque esas ciudades no cuenten con clínicas que realizan abortos. Los opositores han calificado la campaña como un esfuerzo para intimidar a las mujeres para que no busquen abortos en lugares donde sigue siendo legal.
“Los texanos ya viven bajo algunas de las prohibiciones del aborto más restrictivas y peligrosas del país, y aun así los extremistas antiabortistas siguen imponiendo barreras a la asistencia médica esencial que son innecesarias, confusas y provocan miedo”, dijo Autumn Keiser, vocera de Planned Parenthood of Greater Texas.
Por su parte, Mark Lee Dickson, un pastor de Texas que ha liderado los esfuerzos para imponer restricciones, elogió la votación.
“Señores, anhelo el día en que, de costa a costa, el aborto se considere un gran error moral, social y político y se prohíba en todos los estados”, dijo Dickson a los comisionados.
En los condados que ya cuentan con medidas similares —Mitchell, Goliad y Cochran— no se han registrado infracciones de la prohibición de viajar. Las medidas no castigarían a las mujeres que necesitan realizar un aborto, pero supondrían riesgos legales para las personas que ayudan a transportarlas para someterse al procedimiento.
Los expertos jurídicos han puesto en duda que las ordenanzas puedan aplicarse.
“Este tipo de cuestiones no se han puesto a prueba, por lo que se trata de un caso totalmente nuevo”, afirmó Seema Mohapatra, experta en derecho sanitario y profesora de Derecho en la Universidad Metodista del Sur.
Las autopistas que atraviesan el condado de Lubbock llevan hasta Nuevo México, que tiene una de las normativas sobre el aborto más permisivas de Estados Unidos.
La oficina del sheriff del condado Lubbock declinó hacer comentarios sobre la prohibición o su aplicación.
Texas es uno de los 13 estados que prohíben el aborto en todas las fases del embarazo. Un juez de Texas dictaminó en agosto que la prohibición del estado era demasiado restrictiva para las mujeres con complicaciones en el embarazo. Sin embargo, la sentencia quedó rápidamente suspendida tras un recurso presentado por el estado.
