Laredo, Tx.– Los oficiales de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos, en el puerto de entrada de Laredo, encontraron a un hombre buscado por múltiples órdenes de arresto pendientes por presuntos delitos violentos y delitos graves relacionados con las drogas en el estado de Texas.
“La seguridad de nuestras comunidades sigue siendo nuestra prioridad”, dijo el director del puerto de entrada de Laredo, Albert Flores.
“Los agentes de la CBP lograron detener a un individuo peligroso y colaboraron con varias agencias de aplicación de la ley para llevarlo ante la justicia”, indicaron.
El miércoles 4 de septiembre, los oficiales de la CBP en el Puente Gateway to the Americas remitieron al peatón Jaime Ruiz Villanueva, de 25 años, ciudadano estadounidense, para una inspección secundaria.
Durante el examen secundario, los oficiales de la CBP utilizaron la verificación biométrica y las bases de datos de las fuerzas del orden federales para verificar su identidad y descubrieron que era objeto de múltiples órdenes de arresto pendientes por delitos graves.
Las órdenes de arresto incluían homicidio/asesinato solicitado por el Departamento de Policía de Fort Worth, violación de la libertad condicional por un cargo original de posesión de sustancias controladas solicitado por la Oficina del Sheriff del Condado de Midland y agresión que causó lesiones corporales a un miembro de la familia, solicitado por la Oficina del Sheriff del Condado de Dallas.
Se confirmó que las tres órdenes de arresto estaban activas. Los oficiales de la CBP transportaron a Villanueva a la cárcel del Condado de Webb para esperar los procedimientos penales.
El Centro Nacional de Información Criminal es una base de datos automatizada centralizada diseñada para compartir información entre las agencias de aplicación de la ley, incluidas las órdenes de arresto pendientes por una amplia gama de delitos.
Con base en la información del NCIC, los oficiales de la CBP han realizado arrestos previos de personas buscadas por homicidio, fuga, lavado de dinero, robo, distribución de narcóticos, abuso sexual infantil, fraude, hurto y deserción militar.
Los cargos penales son meras acusaciones. Los acusados se presumen inocentes a menos que se demuestre su culpabilidad en un tribunal de justicia.
