CIUDAD DE MÉXICO.-A 38 días de que sea inaugurado el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), cuatro trabes de un puente que va hacia la terminal aérea se colapsaron sobre la Autopista México-Pachuca.
El accidente, que dejó como saldo un conductor herido, se debió a que las trabes -de 60 toneladas cada una- estaban sostenidas por trozos de madera, según trabajadores.
‘No estaban aseguradas y se corrió la madera por la vibración de los autos’, dijo un ingeniero en el lugar del accidente, en el kilómetro 35.900 de la autopista.
Los trabajadores informaron que la empresa constructora es ACCSA, Desarrolladora e Infraestructura y la concesionaria de la autopista es MRO Golfo Centro.
Felipe Ortiz Rodríguez, quien quedó prensado en la cabina de una camioneta tipo Van, fue trasladado al Hospital del IMSS de Tecámac.
‘La verdad yo no sé si se van a hacer cargo de los gastos, porque hasta ahora nadie se quiere hacer responsable’, se quejó la esposa.
Apenas el jueves, el Presidente Andrés Manuel López Obrador insistió en que la inauguración de la obra será el 21 de marzo.
‘Esto sucede por las prisas’
Felipe Ortiz, de 46 años, chofer de una empresa aduanera, conducía solo la madrugada de ayer sobre la México-Pachuca, en el kilómetro 36, a la altura de Tecámac, cuando cuatro trabes de 34 metros y 60 toneladas cada una cayeron encima de su camioneta blanca, y a él le rompieron la tibia y el peroné.
‘Vivió de milagro’, resumió su pareja, Carmen mientras esperaba afuera de urgencias.
‘Está consciente, nada más ahorita son sus piernas que no las puede mover, más la pierna derecha, y trae golpes en la cabeza, en la cara, en las manos, en todo el cuerpo’, añadió acompañada por otras tres mujeres que la consolaban.
Pasadas las tres de la tarde, el grupo esperaba a que llegara el ortopedista para que confirmara si iba a ser trasladado al Hospital del IMSS en Troncoso para una operación.
‘Esto pasa por las prisas del nuevo aeropuerto y ahora a ver quién se hace responsable’, acusó una de las mujeres que acompañaban a la esposa del accidentado.
Carmen contó que su pareja iba de regreso hacia la Ciudad de México tras entregar una carga cuando, a unos seis kilómetros de las nuevas pistas, una zona de trabajos apresurados para conectar al AIFA, que será inaugurado el 21 de marzo, escuchó un fuerte derrumbe y que por instinto frenó y trató de meter la reversa. Una trabe de concreto cayó sobre el cofre.
En el lugar del colapso, el mismo por donde pasó el Presidente López Obrador un día antes camino a la terminal, tres trabajadores consideraron que el derrumbe se debió a que las trabes sólo estaban detenidas por trozos de madera que se deslizaron por la vibración de los autos.
Las pequeñas bases de cada trabe estaban rotas en algunas esquinas indicando el sentido del deslizamiento y debajo cuatro máquinas separaban el concreto y alambre.
El derrumbe también causó estragos en la circulación hasta pasado el medio día, luego de que las trabes habían sido removidas casi en su totalidad con maquinaria y excavadoras.
Carmen, quien no autorizó publicar su nombre completo por temor, acusó que sólo había llegado una ambulancia del Municipio de Tecámac para el traslado, pero que la concesionaria de la autopista -MRO Golfo Centro- no se quería hacer responsable de los daños del auto, ni tampoco nadie del Gobierno federal les había ofrecido ayuda.
‘A la empresa le corresponde demandar por el seguro del carro, pero de él (su pareja) nadie ha dicho nada’, lamentó.
El jueves pasado, en el festejo del Día de la Fuerza Aérea, López Obrador reafirmó su promesa de inaugurar el AIFA en marzo, a pesar de que las obras de conexión terrestre -a cargo del Gobierno del Estado de México y de la Secretaría de Comunicaciones- no están terminadas.
‘Llueva, truene o relampaguee, el 21 de marzo del 2022 vamos a estar inaugurando el aeropuerto’, aseguró desde junio de 2020 sobre la obra presupuestada en 75 mil millones de pesos.
